La cantante británica MIA acaparó este domingo el protagonismo en la XLVI Super Bowl, disputada en el Lucas Oil Stadium de Indianápolis, robándoselo así a Madonna. Durante el descanso del partido entre los Giants de Nueva York y los New England Patriots, la rapera inglesa sorprendió con su polémica actuación junto a Madonna.
Mientras ésta cantaba su nuevo sencillo Give Me All Your Luvin, MIA levantaba su dedo corazón mientras soltaba un improperio -según muchos medios estadounidenses, dijo "me importa una mierda", aunque era difícil de escuchar claramente lo que decía-. Un gesto que ha provocado la airada reacción de la mayor parte del público estadounidense y que ha recordado a la polémica suscitada en 2004, cuando Justin Timberlake destapó un pecho de Janet Jackson en el Reliant Stadium de Houston (Texas).
El portavoz de la NBC, Christopher McCloskey, ha pedido disculpas por el "gesto inapropiado" de MIA. "Fue un gesto espontáneo que nuestro sistema de retraso de transmisión captó demasiado tarde", añadía McCloskey.
MIA es conocida por su éxito Paper Planes, del año 2007, y por una nominación al Grammy por su tema Straight to Hell, que fue utilizado en la película Slumdog Millionaire.