Romario: "Exterminamos un cáncer del fútbol"

El diputado y exfutbolista brasileño Romario de Souza Farías ha dicho que con la renuncia del presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira, el deporte nacional se ha librado de "un cáncer". "Hoy podemos celebrar. Exterminamos un cáncer del fútbol", ha indicado Romario en un mensaje publicado en su cuenta de la red social Facebook.

Tras 23 años en el cargo, Teixeira ha presentado su renuncia a la presidencia de la CBF y también a la jefatura del Comité Organizador Local (COL) del Mundial de 2014, responsabilidades que asumirá desde ahora el vicepresidente de la entidad, José María Marín.

Teixeira atribuyó su decisión a problemas de salud, aunque la prensa local conjeturaba desde hace semanas con su posible salida por las "presiones" que suponían diversas acusaciones de corrupción e irregularidades durante su larga gestión.

En su mensaje, Romario deseó "suerte" al nuevo presidente de la CBF, pero no dejó de recordar que Marín recientemente fue objeto de un escándalo porque, cuando participaba en la entrega de premios a futbolistas juveniles, se guardó en un bolsillo una de las medallas que estaba entregando.

La prensa local interpretó que Marín se había apropiado de la presea, aunque la Federación Paulista de Fútbol, que organizaba el acto, aclaró luego que la medalla le había sido otorgada al dirigente.

"Espero que el nuevo presidente, que hurtó la medalla del jugador del Corinthians en la Copa Sao Paulo de juveniles, no haga de ese acto una constante" en la CBF, señaló Romario, quien apuntó que si así fuera, "será necesario exterminar al sida también", informa EFE.

El mejor futbolista del mundo en 1994, según la FIFA, quien desde enero de 2011 ocupa un escaño en la Cámara de Diputados, también manifestó su deseo de que "a partir ahora la CBF le dé una nueva cara al fútbol brasileño", aunque matizó que cree que eso será "muy difícil o casi imposible". En su opinión, en la CBF debe "ser hecha una limpieza general" y "en todos los sentidos".

Pese a su manifiesta desconfianza, Romario expresó su "felicidad" por "participar del momento de victoria y cambio en el fútbol brasileño" que supone la salida de Teixeira, con quien mantenía unas muy tensas relaciones desde hace años.