El nigeriano Emmanuel Emenike, futbolista del Spartak de Moscú, ha sido sancionado para lo que resta de temporada –termina en mayo- por dirigir una peineta hacia los aficionados del Dinamo de Moscú, quienes le estaban profiriendo insultos racistas y emitiendo los sonidos de un mono cada vez que tocaba el balón.
"Hemos decidido que es un castigo adecuado. Tuvimos en cuenta que el jugador más tarde se arrepintió de su acción", indicó el presidente de la comisión ética de la Federación Rusa, Vladimir Vasilyev, según recoge El Mundo. Emenike, que además será multado con 12.743 euros, pidió "perdón" por no haber sabido "controlar su temperamento".
Por su parte, el entrenador del Spartak de Moscú, Valery Karpin, que fuera jugador del Valencia, Celta y Real Sociedad, ha criticado la resolución. "Lo que hizo Emenike no estuvo bien, pero no entiendo la decisión de la Federación que no toma ninguna acción contra los aficionados del Dinamo que insultaron a Emenike con tintes racistas".
Antecedentes
No es la primera vez que una conducta racista salpica a un estadio de fútbol en Rusia. Este mismo mes ya sucedió otro incidente, después de que un aficionado arrojase un plátano desde la grada del estadio del Lokomotiv de Moscú al jugador congoleño del Anzhi, Christopher Samba. La temporada pasada ya ocurrió otro episodio similar cuando a Roberto Carlos, jugador del Anzhi, le lanzaron otro plátano desde la grada.