Tras haberse proclamado campeona olímpica en la clase RS:X femenino, Marina Alabau admite haber vivido una semana "muy intensa" y dice no recordar el primer día de competición: "Ha sido una semana muy intensa. El primer día no lo recuerdo, parece que fue hace tres meses. He tenido muchas sensaciones. Algunas buenas, otras malas. Pero ahora ya me puedo relajar".
La española lideró desde el primer día la competición, algo que se le da realmente bien ya que cuando lo hace siempre acaba ganando: "En todos los campeonatos que he empezado primera, los he podido mantener. He tenido días buenos, navegando muy a mi bola, sin tener en cuenta a las demás chicas. Luego empecé a controlar más. Estoy muy contenta con lo que he hecho. Tenía mucha presión encima".
Ahora, con el oro ya colgado del cuello, la regatista sólo piensa en celebrarlo aunque aún no sabe cómo: "Nos pegaremos una fiestecita aunque aún no he pensado en nada más". Marina ha hablado sobre las sensaciones que ha tenido cuando estaba en lo más alto del podio escuchando el himno español. "No se puede describir. En una palabra es imposible. Es una sensación muy bonita en la que he tenido muchos recuerdos".
En los próximos Juegos Olímpicos, en 2014 en Brasil, aún no se sabe si la modalidad en la que compite Marina –RS:X windsurf– seguirá, por lo que estará fuera de la competición hasta noviembre, que es cuando se decide: "Hasta casi finales de año no se sabe si quitan el windsurf. Estaré fuera de la competición hasta entonces. Si deciden quitarlo navegaré en el kitesurf. No tengo otra opción".