Pablo Laso, entrenador del Real Madrid, se ha mostrado muy motivado en la entrevista en esRadio para analizar el comienzo de la temporada, en la que asegura que el objetivo es luchar "por todos los títulos". Comentaba además que tiene ganas de quitarse las dos espinitas del año pasado, en la que a pesar de conquistar la Copa del Rey se quedó a las puertas de ganar la Liga, "tuvimos muy cerca el título; recuperamos el factor cancha, perdimos un partido con un triple sobre la bocina..." y fuera de la Euroliga.
"Aquello nos abrió mucho los ojos, se aprende mucho de una derrota como esa, y nos dio un gran impulso hacia arriba para encarar el resto de la temporada. Me da pena porque hicimos una gran Euroliga, pero lo clave es ganar el día importante, y no lo hicimos". Laso, eso sí, afirma que "esas dos espinas clavadas deben ayudarnos a seguir creciendo".
Sobre cuál es el mayor logro que ha conseguido desde su llegada al banquillo blanco, ha afirmado con rotundidad que es "el increíble crecimiento de este equipo", descartando claramente que fuera "haber quitado ese miedo al Barça". "Puede ser que sea importante, pero hay que tener claro que el Barça es sólo un rival más".
Laso ha descartado también sentir una mayor presión en esta segunda campaña, afirmado que "tienes la responsabilidad de entrenar a un gran equipo, y esa es la misma desde el primer día hasta el último. Cuando entrenas un equipo como el Madrid, siempre estás obligado a unas metas, y eso es todo".
Analizó también algunas de las caras nuevas de esta temporada. De Draper comentó que aunque apenas ha jugado en pretemporada, "es un movimiento hecho claramente para mejorar el equipo, porque aportará unas necesidades que le faltaban al equipo", aunque, eso sí, tiene claro que "hay que tener paciencia, tardará un tiempo en acoplarse". Y sobre Slaughter destacó su "gran energía defensiva y capacidad atlética. Nos faltaba esa energía en el juego interior", y dejó una perla sobre el pívot. "Más allá de los números, puede ser el jugador con mejores intangibles de toda la Liga".
Comentó también Laso que, como todo el mundo, espera otro paso adelante de Mirotic este año. Su importancia en el equipo será mayor, y tiene mucho potencial. Añade el técnico blanco que "terminará jugando con la selección y dando muchas alegrías a España, porque es un jugador fantástico, aunque tiene una competencia directa muy grande (Serge Ibaka). De todos modos, eso ahora me importa bastante poco. A mí lo que me interesa es que esté centrado aquí y dé lo mejor posible al equipo".
Sobre si siente que ha respondido ya a las críticas que se alzaron contra el club por su contratación el año pasado, cuando era un técnico de perfil medio, Laso se muestra cauto. "Llevo demasiados años en el baloncesto, como para pensar en callar bocas. Para nada. Yo respeto a todo el mundo, y mucho a aquél que opine sobre baloncesto. Aunque siempre desde la base y el conocimiento. Nunca me he sentido maltratado, sé dónde estoy, y claro que ha habido algunas críticas cuando llegué, pero es lo que conlleva".
Para terminar, habló del estilo de juego de su equipo, el que ha encumbrado al técnico. Afirma que "este estilo que ahora todos aplauden no es un invento de Pablo Laso. Lo primero que hago es pensar en los jugadores que tengo. Y en función de eso, mirar a ver cómo podemos jugar. Si incido mucho por ejemplo en el rebote, eso me puede permitir correr. El entrenador debe manejar un poco el ritmo de sus equipos, pero siempre pensando en el gran talento de los jugadores de los que dispongo".