Cesc Fábregas ha desvelado que se resintió de su lesión muscular en su regreso al Camp Nou, al afirmar que notó un pinchazo al cuarto de hora del partido que provocó que jugase mermado antes de ser sustituido. "Ha sido una pena porque me sentí muy bien de inicio, pero a los quince minutos he sentido un pinchazo y sabía que el partido acabó para mí. Las ganas de jugar me han permitido seguir, pero luego me he tenido que cambiar", ha dicho a TVE, informa EFE.
Cesc ha lamentado la eliminación del Arsenal, la expulsión del holandés Van Persie y la oportunidad de gol desperdiciada por su equipo en los últimos compases del partido. "Comenzamos haciendo todo bien, les tapamos, pero es una pena. No ha podido ser", ha destacado.
"Se juntan muchas cosas que son cosas del fútbol. A veces te benefician y otras te perjudican, pero no se puede expulsar a un chico por tirar la pelota, es muy raro. No hemos tenido prácticamente oportunidades. A pesar de que hoy han sido mejores, les hemos jugado de tú a tú, defendimos todo lo que pudimos y hemos acabado teniendo una oportunidad que nos podía haber dado la clasificación", ha añadido.
Una vez eliminado el Arsenal, Cesc ha deseado suerte al equipo en el que se formó. "Les deseo mucha suerte y que lleguen lo más lejos posible", ha dicho.