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Champions League

Un Bernabéu espectacular pone fin a la fiesta acordándose de Piqué: "No sé con quién empezó todo"

Tras visitar a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y a la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, el Bernabéu pone el fin de fiesta.

La fiesta en el Santiago Bernabéu ha comenzado con retraso pero nadie en las gradas se ha marchado. Todo empezó sobre las 22.45 cuando de repente el Santiago Bernabéu se quedó a oscuras. Un cambio que agitó a los 80.000 espeactadores. El estadio sólo se iluminaba con las luces de los teléfonos móviles, algunos focos de blanco y morado, las líneas del campo iluminadas de blanco y los once globos que representaban las copas de Europa. Era una escena maravillosa y espectacular.

En terreno de juego sólo había una caja. Eso sí, era gigante. La misma que se utilizó para ver la final de la Champions League. Cuatro pantallas que también servían como plataforma donde iban subiendo uno a uno todos los protagonistas que tenían una entrada al estadio al estilo de Hollywood. Al frente del tunel de vestuario había una cascada de agua que combinada con humo y unos focos, reflejaba el nombre y el dorsal de cada jugador. El speaker hacía sonar el nombre del jugador al ritmo de Seven Nation Army del grupo The White Stripes. Eran autenticas estrellas del Rock.

El más aclamado fue Cristiano Ronaldo y el que llamó la atención, al margen de Sergio Ramos que salió con la Champions de Milán, fue Álvaro Arbeloa. El defensa se quitó la bandera de España y enseñó un dorsal diferente. Llevaba el 21 de Cheryshev, cedido en la segunda parte de la temporada en el Valencia.

Con todos los jugadores ya sobre el escenario, comenzaron los discursos de los jugadores a la grada. En principio sólo estaba previsto que hablara Sergio Ramos pero el capitán cedió el turno a Zidane y el entrenador les pidió que hablaran todos. Y así fue. Nadie, ni los que sólo saben cuatro palabras de español, se libró de hablar en público.

Cristiano Ronaldo se metió aún más a la afición en el bolsillo. "Yo sí tenía ganas de hablar", empezó. "Sin vosotros no podíamos haber ganado esta copa tan bonita. Estoy orgulloso de vestir esta camiseta blanca que me queda de puta madre. También quiero cantar... Así, así, así gana el Madrid" y cerró su actuación con su famosa celebración y el "siiiiiii" de la grada. Arbeloa, sin mencionarle, se acordó de Gerard Piqué. "Yo no sé cuándo ni con quién empezó todo pero gracias a todos vosotros porque sois la polla" indicó. Lucas Vázquez no pudo hablar porque la grada no le dejaba. "Lucas seleción, Lucas selección", cantaban mientras el español no podía dejar de reír. Todos, jugadores y afición, cantaron el himno de la décima mientras el club no escatimaba en fuegos artificiales, creando un momento mágico y sí, se acordaron de Gerard Piqué. Pero lo hizo la grada. "Piqué, saluda al campeón".

Empezaron el Tour con Carmena

La jornada de celebraciones tuvo continuidad en el día de hoy tras una noche larga que terminó en Cibeles a primera hora de la mañana. Los jugadores del Real Madrid han continuado la fiesta de la undécima Copa de Europa en el Ayuntamiento de Madrid donde fueron recibidos por Manuela Carmena. La alcaldesa comenzó su discurso pidiendo un aplauso a todos los presentes. "Gracias, gracias y gracias", inició Carmena quien admitió haber tenido el "alma en vilo" ayer en el palco de San Siro en Milán.

"Tengo que daros un enorme abrazo en representación de Madrid. Ayer pensaba durante el partido que había 480 millones de personas viendo el encuentro. Gracias a vosotros por poner en el epicentro del mundo a Madrid. Sois los mejores", afirmo la alcaldesa que añadía que "el Real Madrid interpreta los valores del deporte. Y eso es una maravilla".

En esta ocasión y a diferencia de lo que sucedió con el equipo de baloncesto del Real Madrid, la alcaldesa no regaló ceniceros a los jugadores. Cada futbolista se llevó unos gemelos con el Skyline de Madrid para que "tengáis a Madrid siempre cerca de vuestra piel".

También tomó la palabra Florentino Pérez que dedicó el título a las 16 víctimas de una peña madridista en Irak. "Esta copa es para ellos y para los fallecidos esta pasada noche en Bagdad". Muchos de los jugadores presentes se sorprendieron cuando el presidente confirmó un nuevo atentado en un "local madridista" en Irak que ha dejado 12 fallecidos más. Florentino Pérez ensalzó las virtudes de la plantilla, capaz de "creer en lo imposible y remontar situaciones muy difíciles. Los que conocemos de cerca el talento de esta plantilla sabíamos que estos jugadores, con Zidane al frente, son capaces de lograr lo que para muchos es imposible. También se acordó del Atlético de Madrid, "un formidable competidor, un club amigo y vecino". Fue mencionar al club rojiblanco y la sala interrumpió al presidente con un aplauso generalizado.

Cifuentes se vistió con dos camisetas del Madrid

Tras la visita al Ayuntamiento, el autobús del Real Madrid partió hacía la Sede de la Comunidad de Madrid donde brindó la undécima Copa de Europa a miles de madridistas que estaban esperando en la Puerta del Sol. A las 20:45, los jugadores del Real Madrid salieron al balcón donde Zidane y Sergio Ramos levantaron la copa. Los jugadores fotografiaron la escena espectacular.

No había espacio para más aficionados. Parecía nochevieja. Fue Ramos, el capitán, quien tomó la palabra con microfono en mano para acordarse en primer lugar de Zidane. "Os merecéis esta copa, madridistas", gritó.

Los seguidores pidieron que Zidane hablara y el técnico no rehuyó el microfono. "Hemos traído la Copa de Europa para todos vosotros. ¡Hala Madrid!", decía Zizou que perdía su timidez para gritando de alegría. El siguiente en tomar la palabra fue Cristiano Ronaldo que realizó su famoso grito junto a todos los madridistas presentes. Tras el capitán y Ronaldo, la afición pidió que hablara Álvaro Arbeloa y el futbolistas, que dejará el Real Madrid este verano, se arrancó cantando una de las famosas canciones de la grada del club. "Madrid, yo te quiero, yo te adoro, Madrid hay uno sólo, te llevo en el corazón....". Fue el punto y final a una gran escena donde cientos de cámaras iluminaban el atardecer.

Antes vimos como el Real Madrid regalaba dos camisetas a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, quien estuvo simpática como casi siempre. Es madridista y se le ve muy a gusto en este tipo de actos. Se puso las dos camisetas y después de condenar los atentados terroristas en Irak, realizó un largo discurso elevando los valores del Real Madrid y de la capital de España con los dos finalistas de la Champions League. "Pese a ello, hoy es un día feliz para los madrileños y los seguidores del Real Madrid. Ya ha cosechado la Copa número 11 y no será la última. De cada 5 Copas de Europa, una la ha ganado el Real Madrid. Soy uno de los vuestros. Enhorabuena de corazón. Sois los mejores. Quiero felicitar al Atlético de Madrid. Tenemos que reconocer el trabajo y el esfuerzo que han hecho. Gracias a ellos y a vosotros, Madrid es una referencia. De la adversidad también se aprende. Un beso a Juanfran. Siempre hay que creer. Hasta el último minuto del partido. Que lo que ha pasado en Milán, con dos equipos madrileños, no tarde en repetirse. Hala Madrid", dijo Cristina Cifuentes.

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