El Bayern, una máquina ofensiva en la que que Ribéry y Robben atraviesan el mejor momento de forma de los últimos años, que cuenta con uno de los mejores depredadores de todo el mundo, Lewandowski mantiene intacto su olfato de gol, con Vidal siendo el amo de la sala de máquinas y un Thiago que dirige con maestría la sinfonía ofensiva del conjunto bávaro, el tendón de Aquiles de los de Ancelotti es la retaguardia. La zaga es el punto más frágil de un equipo que, en ocasiones, se parte en demasía y sufre con las transiciones rivales.
Si hay una pieza segura e importante en la defensa del Bayern esa es la de Mats Hummels. El ex del Borussia es el jefe de la zaga y la prolongación de Ancelotti en el campo. El defensa central teutón se tuvo que retirar del entrenamiento de este domingo en camilla y retorciéndose de dolor de su tobillo derecho tras un fuerte choque con un compañero durante un rondo, y su presencia ante el Real Madrid está prácticamente descartada. Su baja sería un tremendo mazazo para los bávaros.
Neuer, seria duda
Otra pieza capital para Ancelotti trae de cabeza al técnico italiano. Se trata de Neuer. El portero internacional alemán sigue sin entrenarse, y a pesar de que Carletto afirmó que su presencia ante el Madrid estaba confirmada al "100%", lo cierto es que sus problemas en uno de sus gemelos ya le han hecho perderse los duelos ante el Augsburgo, Hoffenheim y el Dortmund. Según comentan en Alemania, su recuperación podría haber sufrido un frenazo.
El que también tiene problemas en uno de sus tobillos es Thomas Müller. El delantero se ha perdido los dos últimos partidos y, si llega al duelo, contra el Madrid no lo hará al 100%.
La buena noticia para Ancelotti es la recuperación de Douglas Costa. El brasileño ha conseguido evitar el quirófano hasta final de temporada y reapareció ante el Dortmund tras perderse los últimos tres partidos por sus problemas en la rodilla derecha.