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Champions League

Goleada balsámica del Real Madrid en Nicosia para sellar el pase a octavos (0-6)

El Real Madrid vuelve de Chipre con más confianza tras una goleada en la que Ronaldo y Benzema marcaron por partida doble.

El Real Madrid vuelve de Chipre con más confianza tras una goleada en la que Ronaldo y Benzema marcaron por partida doble.
Los jugadores del Real Madrid celebran uno de los seis goles al APOEL. | Cordon Press

La noche más plácida de la temporada. El Real Madrid no necesita todos los dedos de una mano para contar los partidos donde no sufrieron hasta el pitido final. Y dos han sido ante el Apoel. Superior, tremendamente superior, se mostró el campeón de Europa en Nicosia. De menos a más hasta firmar una goleada escandalosa, que no debería servir para sacar conclusiones de peso pero que puede ser un punto de inflexión por su contundencia. Y es que el Madrid vuelve de Chipre con varias maletas que no facturó en la ida. Dentro hay confianza, buenas sensaciones y esperanza para volver a creer. Un equipaje más que necesario para una remontada harto complicada en Liga. Eso sí, que nadie piense que ganar al Apoel o el sábado al Málaga —equipo en puestos de descenso— cicatrizará las heridas del derbi, Wembley, Girona...

El Real Madrid no tuvo rival enfrente. Es difícil de entender que el Borussia Dortmund empatara dos partidos ante este Apoel, que por momentos parecía un equipo de amigos. Dos ejemplos intolerables de esta competición: el 0-6 en el que hay cinco errores de principiantes que provocan que Cristiano Ronaldo marque a portería vacía o que en los últimos cinco minutos el Madrid tuviera una jugada ofensiva de seis atacantes contra dos defensas.

Con este panorama, el Real Madrid se puso las botas. Se divirtieron. Qué falta les hacía. Vimos, después de mucho tiempo, a Cristiano Ronaldo sonreír. A Benzema marcando, incluso dos goles. A Marcelo recorrer la banda como hacía hasta esta temporada o a Kroos y Modric filtrando pases profundos, peligrosos, en horizontal. El Apoel puso la alfombra roja y el Madrid lo aprovechó con un festival goleador al que se hubiera unido Chendo si se hubiese vestido de corto.

Zidane no hizo tantos cambios como se esperaba. Asensio y Lucas entraron por Casemiro e Isco para formar un 4-4-2 con extremos a pie natural y con Modric y Kroos por dentro. El sistema, propicio para acumular muchos centros laterales, no era el más idóneo para el encuentro y más si tenemos en cuanta que el Madrid sólo había marcado un gol de cabeza. Pero da la impresión de que, jugase con quien jugase y con el sistema que escogiera, la victoria siempre iba a ser para el visitante. Pese a ello, no se debe dejar de ensalzar las múltiples virtudes mostradas por los blancos. Kroos y Modric conectaron con todos los jugadores por delante de ellos. Lucas y Benzema, se movieron por fuera y Ronaldo y Asensio por dentro. El mallorquín aprovechó su oportunidad pese a no ver puerta. Tiene que jugar más. Tiene un ritmo superior al resto. Tiene combinación en corto, centros laterales, disparo lejano. No está para jugar media hora en tres partidos.

El gol fue para los que más lo necesitaban. Goles contra la depresión. Depresión de Ronaldo y Benzema que marcaron dos cada uno. Gol de Nacho, en un saque de esquina. Y gol de Modric, el que abrió la lata con una volea desde la frontal del área. Podrían haber jugado de inicio Ceballos, Theo o Mayoral. Quizá demandaban una oportunidad que obtuvieron en la segunda parte, ya con el encuentro resuelto. Zidane optó por sus jugadores de confianza, precisamente para que cogieran eso, confianza.

El Madrid, después de varios encuentros con lentitud en la circulación de pelota y con falta de ideas, recuperó ambos galardones, típicos de este equipo. ¿Que no estuviera Isco, el jugador que más retiene la posesión, es una mera coincidencia? Habrá personas que sí lo piensen, seguro. Lo cierto es que el Madrid sí fue que arrasa como un tsunami saliendo desde atrás con fuerza. Lo cierto es que el Madrid si fue ese que toca y toca con rapidez y fantasía cerca del área contraria. Ahí hay que destacar a Kroos con dos pre asistencias que no saldrán en las estadísticas.

Pero para estadística la de Cristiano Ronaldo. Termina el año con 17 goles. Récord absoluto. Nadie había marcado tantos goles en un año en la Champions. Le costó pero marcó. El 0-5, de gran cabezazo y el mencionado 0-6. Antes, ya había sido protagonista por una acertada asistencia a Benzema. El portugués tuvo la oportunidad de intentar definir ante el portero pero escogió la opción más difícil, la menos egoísta. Gary Lineker aprovechó la circunstancia para mofarse en las redes sociales y sentenciar con ironía que "ha vuelto Benzema". No ha vuelto ni Benzema ni Ronaldo. Para eso, debemos esperar.


Ficha técnica

Apoel Nicosia, 0: Nauzet; Roberto Lago, Rueda, Carlao, Vouros; Nuno Morais (Ebecilio, m.66), Vinicius (Farias, m.59), Sallai (Efrem, m.60), Zahid; Poté y Aloneftis
Real Madrid, 6: Casilla; Carvajal, Varane, Nacho, Marcelo (Theo, m.58); Kroos (Ceballos, m.58), Modric, Lucas Vázquez, Marco Asensio; Cristiano Ronaldo y Benzema (Mayoral, m.64)

Goles: 0-1, m.22: Modric; 0-2, m.39: Benzema; 0-3, m.41: Nacho; 0-4, m.45: Benzema; 0-5, m.48: Cristiano Ronaldo; 0-6, m.53: Cristiano Ronaldo
Árbitro: Artur Dias (Portugal). Amonestó a Carvajal, del Real Madrid
Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones, Grupo H, disputado en el GSP Stadium de Nicosia. Lleno, con 22.000 seguidores en las gradas

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