El defensa, de 23 años, fichó por el Barça en el verano pasado por 25 millones de euros. No pudo ser inscrito en la Liga de Campeones y sólo pudo jugar partidos de competición doméstica, en total doce de los 38 en Liga, además de dos partidos de Copa. El presidente del club barcelonista, Sandro Rosell, ha explicado que la venta de Chygrynskiy al Shakhtar Donetsk es una buena inyección para la economía del club.
Chygrynskiy firmó con el Barça el 28 de agosto del año pasado, justo después de que el Shakhtar y el conjunto azulgrana jugaran la final de la Supercopa de Europa. Tres días después, el defensa fichó por el club catalán. El 12 de septiembre, el central debutó en partido oficial con el Barça: en Getafe (0-2). Desde su estreno y, a pesar de contar con el apoyo de Pep Guardiola, quien apostó decididamente por él, los inicios no fueron fáciles para Chygrynskiy, debido a la calidad de la pareja de centrales: Gerard Piqué y Carles Puyol.
Además, como jugó la Supercopa de Europa, el ucraniano no pudo ser inscrito para jugar en la Liga de Campeones, por lo que sus apariciones con el Barça se limitaron a la Liga y a la Copa del Rey. En total, Chygrynskiy jugó doce partidos ligueros (881 minutos) y dos de Copa (190 minutos). Un total de 1.071 minutos que le han salido muy caros al Barça, puesto que ha recuperado diez millones de los 25 en los que estaba tasada la operación.
El traspaso del central es el segundo del Barça en los últimos días. El anterior fue la venta de Touré Yayá al Manchester City a cambio de 24 millones de euros. Mediante un comunicado, el Barça ha querido agradecer "el esfuerzo y la predisposición" que el jugador ha demostrado desde que llegó al club, así como "su plena integración" en el equipo.
Paralelamente a la marcha de Chygrynskiy, el Barça tiene pendiente para este una reunión con uno de los representantes de Rafael Márquez, Enrique Nieto, sobre el futuro del central mexicano. La posibilidad de que Márquez pudiera abandonar el equipo, tal y como se había planteado inicialmente, está en entredicho después de la marcha del central ucraniano.