La familia españolista, así como la del fútbol europeo, ha vivido una jornada de duelo por la pérdida de Jarque, quien murió en el hotel de concentración del Espanyol en Italia por un ataque al corazón.
Dani Jarque se encontraba en su habitación dialogando por teléfono con su pareja, cuando a las 19:00 horas perdió el conocimiento. El delegado del equipo, José Manuel Calzón, avisado por Ferran Corominas, amigo y compañero de habitación, que había sido alertado por la compañera de Jarque, encontró al capitán sin conocimiento. A pesar de que se le practicó el protocolo de reanimación por parte del médico del club, Miguel Cervera, y posteriormente en un centro médico, falleció en un hospital de Florencia.
Al poco de conocerse la noticia el sábado por la noche, el nuevo estadio españolista, en los términos municipales de las localidades de El Prat y Cornellá, empezó a reunir a consternados seguidores que se congregaron en la puerta 21, número del dorsal del capitán españolista, con velas, bufandas y banderas. Después de una noche impactante para el club barcelonés, por la mañana aterrizó en el aeropuerto de El Prat la expedición del equipo blanquiazul, que suspendió la gira por Italia después del trágico suceso.
El presidente del consejo de administración del Espanyol, Daniel Sánchez Llibre, interrumpió sus vacaciones en Lanzarote, así como el resto de consejeros, y llegó a Barcelona por la tarde y junto a Germán de la Cruz, responsable del fútbol, y miembros del equipo técnico, se desplazó a casa de la familia Jarque para trasladar el pésame a los padres y a la pareja del jugador, Jessica, quien el mes que viene tiene que dar a luz a un bebé.
Está previsto que este lunes el presidente, así como De la Cruz, se desplacen a la ciudad italiana de Florencia para reunirse con el resto de miembros del Espanyol que se encuentra allí a la espera de que, también este lunes, se le practique la autopsia al cuerpo del jugador y sea repatriado cuando antes a Barcelona.
Al margen de estas decisiones, el estadio españolista ha sido un constante goteo de aficionados, y no sólo del Espanyol, sino también barcelonistas, que han querido rendir un homenaje al finado y por un día anular la rivalidad entre los dos clubes. Este domingo por la noche hubo una nueva concentración de seguidores del Espanyol en el estadio de Cornellá, a partir de las 21:00 horas. La afición españolista se ha movilizado como nunca y ya han aparecido iniciativas como la de proponer al consejo de administración del club que dé al nuevo estadio el nombre de Dani Jarque.
Después de este duro golpe y de haber suspendido la gira, en la que aún le quedaban al Espanyol dos partidos por disputar, no existe una agenda en firme en la entidad, a la espera de que pueda concretarse la repatriación del cuerpo de Jarque y los posteriores actos religiosos.