(Libertad Digital) El triunfo obtenido en el encuentro inaugural en Grecia y el empate sacado el sábado en Kiev conceden al conjunto español una ventaja importante para la segunda vuelta de este torneo previo, aunque antes de que se inicie la misma debe superar a un equipo armenio que sobre el papel es un enemigo bastante sencillo. Iñaki Sáez y sus hombres tienen una prueba accesible, aunque el ejemplo de Lituania con su empate en Alemania ha venido bien, por si hacía falta, para recurrir al tópico de "no hay rival fácil". Armenia, un equipo que llevaba más de tres años sin ganar un partido oficial y que se reencontró con el triunfo el sábado en Ereván ante Irlanda del Norte en el estreno del técnico rumano Mihai Stoichita, es consciente de su inferioridad, pero no quiere renunciar a nada. En los dos únicos enfrentamientos en la historia de ambas selecciones, en 1995 en la fase previa para la Eurocopa de Inglaterra 1996, España ganó de manera ajustada por 0-2 en Ereván y 1-0 en Sevilla y de penalti.
Stoichita, un técnico forjado en buena parte de los mejores equipos de su país, con experiencias internacionales y que lleva tan solo diez días en el cargo, quiere convencer a sus modestos futbolistas de que aunque se van a enfrentar a estrellas del balompié internacional "son hombres como nosotros". Para ello, aplicará un trabajo de contención intenso en busca de cerrar espacios y velocidad a la contra con los hermanos gemelos Arman y Artavazd Karamyan, y el oportunismo y la habilidad de Artur Petrosyan, la gran referencia de este semidesconocido cuadro armenio. Los jugadores españoles saben que este tipo de partidos son engañosos. La teoría marca un triunfo claro, pero eso es el papel, y lo que quieren y deben hacer es demostrar sobre el campo su superioridad sin dar opción a la sorpresa. Por eso, el primer objetivo en este tipo de encuentros es tan claro como asegurar el triunfo. De goleada nadie quiere hablar, porque eso es secundario de partida, aunque también importante para un equipo como el español que siempre está obligado, por sus mimbres y pretensiones, a agradar y dar espectáculo.
Si esto último lo logra España mejor que mejor, pero lo único que preocupa a los jugadores de Sáez es sacar los tres puntos en litigio, con lo que daría un estirón en la tabla sobre sus principales oponentes. Iñaki Sáez ha introducido hasta cinco cambios respecto al encuentro ante Ucrania. En primer lugar, el madridista Iván Helguera, baja en Kiev por sanción, volverá al centro de la zaga, posición en la que hoy por hoy es indiscutible. Pero lo principal será la vocación ofensiva que quiere darle el seleccionador dando entrada a los deportivistas Tristán y Valerón junto a Raúl, un trío que como tal no funcionó del todo en el pasado Mundial de Corea y Japón, pero que ahora se presenta como el arsenal atacante para superar a Armenia. Las dos otras novedades, además de las de Helguera, Tristán y Valerón, son las de Raúl Bravo y Xavi. El jugador del Leeds sustituye a Aranzábal y el barcelonista a Baraja. La clave, como en tantas situaciones similares, es mantener la concentración atrás para no cometer errores y no permitir que Armenia pueda dar un susto.
El estadio Antonio Amilivia será una auténtica fiesta. Se llenará por primera vez en su corta historia, y es que León nunca ha acogido ningún encuentro de la selección absoluta. Los seguidores leoneses, en especial, y todo el país futbolístico esperan un triunfo holgado y convincente, pero la experiencia aconseja cautela de partida para afrontar este partido que debe ser un broche a la primera vuelta y el inicio de la segunda en la que España quiere sentenciar por la vía rápida su presencia en Portugal para no llegar a los últimos partidos obligada. La casualidad ha provocado que hasta el árbitro, Alon Yefet, tenga incluso su morbo, porque fue el colegiado que expulsó al madridista Roberto Carlos el pasado sábado en el partido amistoso Portugal-Brasil en Oporto tras impactar el brasileño con un hombro en su pecho.
Alineaciones probables
España (confirmada): Casillas; Míchel Salgado, Helguera, Marchena, Raúl Bravo; Albelda, Xavi; Etxeberria, Valerón; Raúl y Tristán
Armenia: Berezovsky; Dokhoyan, Bilibio, Vardanyan, Artur Mkrtchan; Sarkisyan, Voskanyan, Petrosyan, Khachatryan; Arman Karamyan y Artavazd Karamyan
Árbitro: Alon Yefet (Israel)
Estadio: Antonio Amilivia de León. 21,45 horas
Stoichita, un técnico forjado en buena parte de los mejores equipos de su país, con experiencias internacionales y que lleva tan solo diez días en el cargo, quiere convencer a sus modestos futbolistas de que aunque se van a enfrentar a estrellas del balompié internacional "son hombres como nosotros". Para ello, aplicará un trabajo de contención intenso en busca de cerrar espacios y velocidad a la contra con los hermanos gemelos Arman y Artavazd Karamyan, y el oportunismo y la habilidad de Artur Petrosyan, la gran referencia de este semidesconocido cuadro armenio. Los jugadores españoles saben que este tipo de partidos son engañosos. La teoría marca un triunfo claro, pero eso es el papel, y lo que quieren y deben hacer es demostrar sobre el campo su superioridad sin dar opción a la sorpresa. Por eso, el primer objetivo en este tipo de encuentros es tan claro como asegurar el triunfo. De goleada nadie quiere hablar, porque eso es secundario de partida, aunque también importante para un equipo como el español que siempre está obligado, por sus mimbres y pretensiones, a agradar y dar espectáculo.
Si esto último lo logra España mejor que mejor, pero lo único que preocupa a los jugadores de Sáez es sacar los tres puntos en litigio, con lo que daría un estirón en la tabla sobre sus principales oponentes. Iñaki Sáez ha introducido hasta cinco cambios respecto al encuentro ante Ucrania. En primer lugar, el madridista Iván Helguera, baja en Kiev por sanción, volverá al centro de la zaga, posición en la que hoy por hoy es indiscutible. Pero lo principal será la vocación ofensiva que quiere darle el seleccionador dando entrada a los deportivistas Tristán y Valerón junto a Raúl, un trío que como tal no funcionó del todo en el pasado Mundial de Corea y Japón, pero que ahora se presenta como el arsenal atacante para superar a Armenia. Las dos otras novedades, además de las de Helguera, Tristán y Valerón, son las de Raúl Bravo y Xavi. El jugador del Leeds sustituye a Aranzábal y el barcelonista a Baraja. La clave, como en tantas situaciones similares, es mantener la concentración atrás para no cometer errores y no permitir que Armenia pueda dar un susto.
El estadio Antonio Amilivia será una auténtica fiesta. Se llenará por primera vez en su corta historia, y es que León nunca ha acogido ningún encuentro de la selección absoluta. Los seguidores leoneses, en especial, y todo el país futbolístico esperan un triunfo holgado y convincente, pero la experiencia aconseja cautela de partida para afrontar este partido que debe ser un broche a la primera vuelta y el inicio de la segunda en la que España quiere sentenciar por la vía rápida su presencia en Portugal para no llegar a los últimos partidos obligada. La casualidad ha provocado que hasta el árbitro, Alon Yefet, tenga incluso su morbo, porque fue el colegiado que expulsó al madridista Roberto Carlos el pasado sábado en el partido amistoso Portugal-Brasil en Oporto tras impactar el brasileño con un hombro en su pecho.
Alineaciones probables
España (confirmada): Casillas; Míchel Salgado, Helguera, Marchena, Raúl Bravo; Albelda, Xavi; Etxeberria, Valerón; Raúl y Tristán
Armenia: Berezovsky; Dokhoyan, Bilibio, Vardanyan, Artur Mkrtchan; Sarkisyan, Voskanyan, Petrosyan, Khachatryan; Arman Karamyan y Artavazd Karamyan
Árbitro: Alon Yefet (Israel)
Estadio: Antonio Amilivia de León. 21,45 horas