Ronaldinho, Ronaldo, Romario, Dani Alves, Rivaldo... Muchos, y muy buenos, han sido los brasileños que han jugado con el Barcelona. Ahora llega Neymar da Silva, a quien la entidad culé ha atado para las próximas cinco temporadas. Con la estrella del Santos, hasta 28 jugadores cariocas van a vestir de azulgrana a lo largo de sus 114 años de historia, aunque algunos -entre ellos Keirrison, Henrique, Cléo y Jaguaré Bezarra- no llegaron a jugar ningún partido oficial con el club.
La historia viene de muy atrás. Concretamente desde principios de los años 30. En la temporada 1931/32, el Barça fichó a Fausto dos Santos, la Maravilha Negra, quien consiguió anotar tres goles en 30 partidos, un buen rendimiento dada su posición de centrocampista. Esa misma campaña, el meta Jaguaré Bezerra formó parte de la lista de porteros del Barcelona, aunque sólo jugó encuentros amistosos.
Hasta principios de la década de los 80, llegaron algunos brasileños al Camp Nou, pero con cuentagotas (Lucidio Batista, Evaristo de Macedo, Walter Machado da Silva, Mario Marinho y Silvio Modesto Bio).
La película, para bien del espectáculo y el jogo bonito en Can Barça, ha dado un giro radical en los últimos siete lustros, cuando hasta 18 brasileños -incluyendo ahora a Neymar- han reforzado al equipo. Algunos de ellos han sido auténticas estrellas mundiales (Ronaldinho, Rivaldo, Ronaldo, Romario...); otros, decisivos en partidos trascendentes (Juliano Belletti, por ejemplo, marcó el gol que dio al Barcelona la segunda Copa de Europa de su historia tras remontar por 1-2 ante el Arsenal en la final de París); y, los menos, sencillamente unos bluffs: Geovanni, Fabio Rochemback...
Roberto Dinamita, un ídolo en el Vasco de Gama, fue un auténtico fiasco en el Camp Nou, mientras que Cléo sólo jugó un amistoso. A finales de los 80 llegó el central Aloisio, el primer extranjero fichado por Johan Cruyff en su etapa de entrenador. Estuvo dos años en el Barça, caracterizándose por su excelente técnica y su buena colocación sobre el terreno de juego, además de su gran profesionalidad. Ganó una Recopa de Europa y una Copa del Rey antes de ser traspasado al Oporto.
El mayor desembarco de brasileños al Barça se produjo en la década de los 90 con la auténtica globalización del fútbol. ¡Qué decir de Rivaldo o Ronaldo! Sin olvidar a Romario da Souza, aquel "jugador de dibujos animados" -así lo definió en su día Jorge Valdano- que le hizo la famosa cola de vaca a Rafa Alkorta durante un clásico en el Camp Nou (5-0). Junto a ellos, otros dos futbolistas llegaron en los 90 aunque no tuvieron tanto protagonismo: el pistolero Sonny Anderson y Giovanni Silva, famoso por su corte de mangas al público del Santiago Bernabéu en 1997.
Ya en la última década, la gran estrella brasileña que ha aterrizado en el Camp Nou es Ronaldinho Gaúcho. Pero la historia de su fichaje es cuanto menos curiosa. A principios de 2003, el entonces precandidato a la presidencia Joan Laporta tenía un preacuerdo con David Beckham, que atravesaba por su peor momento en el Manchester United a las órdenes de un Alex Ferguson que incluso llegó a lanzarle una bota en pleno partido. Beckham no llegó al Barça, sino que se fue al Real Madrid de la mano de Florentino Pérez, y Laporta aterrizó en la presidencia del club catalán con Ronaldinho.
El jugador de Porto Alegre era su plan B, la bala en la recámara si fallaba el inglés, pero el brasileño ha regalado cinco temporadas al Barça que han sido una auténtica maravilla, llevando al equipo a ganar una Champions y dos ligas consecutivas. Pura magia en el Camp Nou la de Dinho, el hombre que puso en pie al Bernabéu con una victoria ante el Real Madrid por 2-6.
Sin embargo, un alarmante bajón en su rendimiento llevó al nuevo entrenador del equipo en 2008, Pep Guardiola, a prescindir de él y a buscar una salida, que acabó marcando 80 goles en sus cinco temporadas con el Barcelona pese a no ser un delantero nato.
Dani Alves, Adriano Correia y el hoy futbolista del PSG Maxwell -los dos primeros llegaron procedentes del Sevilla- son los tres últimos brasileños que han llegado al Barcelona antes del desembarco de Neymar, uno de los cinco futbolistas más mediáticos del mundo y que, como ya hicieron antes Ronaldinho, Romario, Rivaldo o Ronaldo, también pretende dejar huella en el Camp Nou haciendo grandes cosas al lado de Leo Messi.