El conjunto blanco continúa reuniendo dinero para el fichaje del jugador del Tottenham, Gareth Bale. José Callejón (10 millones) y Raúl Albiol (12 millones) fueron los primeros en aportar dinero a las arcas madridistas en el mercado de verano.
El reciente fichaje de Higuaín por el Nápoles, mismo conjunto que ha fichado a Callejón y Albiol, se cifra en los 37 millones de euros, cifra que supondría cerca de 60 millones de euros procedentes del conjunto italiano.
Además, el Real Madrid ha percibido más dinero de las ventas de jugadores sobre los que tenían algún tipo de derecho. Uno de ellos es Ezequiel Garay, que ha sido traspasado al Manchester United desde el Benfica, una venta que se cifra en los 20 millones de euros, de los que la mitad (10 millones) viajan a las cuentas de Concha Espina. La venta de Álvaro Negredo (Sevilla FC) al Manchester City, supone 4,4 millones de euros para el Real Madrid.
Sumando todas las cantidades, el Real Madrid ha conseguido a través de ventas directas o indirectas una cantidad que se sitúa en 74 millones de euros, cifra que podría verse incrementada si el Valencia termina vendiendo a Roberto Soldado al Tottenham.
Por lo tanto, Florentino Pérez y el club blanco deberían desembolsar la diferencia entre las ventas que se han producido este verano y la cantidad que solicita Daniel Levy, presidente del Tottenham, por Gareth Bale, que se muestra duro ante las negociaciones por su jugador estrella. Si se niega a negociar y el jugador pide un transfer request, el club inglés se verá en la obligación de negociar por el galés Gareth Bale.