Josep Guardiola, dedicó la Supercopa lograda en Praga frente al Chelsea a su predecesor en el banquillo, Jupp Heynckes. "Gracias a los jugadores por ofrecerme esta final, que está dedicada a Jupp Heynckes. Está dedicada a él. Fue una experiencia increíble", dijo.
El catalán destacó el papel del pivote defensivo Javi Martínez, que empató el duelo unos segundos antes del silbato final, y permitió afrontar la tanda de penaltis. "Javi es muy importante para nosotros, y es increíble que pudimos comprarlo. No está al cien por ciento, pero tiene voluntad y lo hizo muy bien", señaló. "Lo necesitamos absolutamente. Pero al final su lesión aumentó", indicó.
"Ha sido un muy buen partido, la gente lo ha tenido que disfrutar, con treinta tiros a portería. Hemos atacado muy bien y ellos nos han atacado en las contras, como siempre hacen los equipos de Mourinho. Tenían la victoria, pero un segundo marca la diferencia en este juego.
El técnico catalán no quiso referirse a la actuación arbitral e indicó que "vencer al Chelsea y a Mourinho es muy difícil, y por eso estoy muy feliz".