La Comisión Disciplinaria de la FIFA ha decidido sancionar al FC Barcelona y a la Federación Española de Fútbol (RFEF) por "infracciones relacionadas con el traspaso y la inscripción de jugadores menores de 18 años". Seung Woo Lee, un delantero surcoreano de 16 años, al que ya señalan como la nueva perla de La Masía, parece ser el origen de la sanción. De los tres supuestos que señala la normativa referente a la protección de menores, no cumple ninguno.
La FIFA establece la validez de los fichajes de jugadores menores de 18 años sólo en tres supuestos: si cambia el domicilio familiar a la ciudad del club que realiza el fichaje por razones distintas al fútbol; si el fichaje se produce dentro del territorio de la Unión Europea y el futbolista tiene un mínimo de 16 años; y si el jugador vive a menos de 50 kilómetros de la frontera de otra federación y el club que le ficha está a menos de la misma distancia.
El potencial futbolístico de Lee Seung Woo, nacido el 6 de enero de 1998 en Gyeonggi-do, fue descubierto por los ojeadores azulgranas en la Copa Danone, celebraba en Sudáfrica en 2011. Se ha convertido en el primer asiático que destaca en la cantera del Barça de forma tan notable.
En febrero de 2013, la FIFA envió un requerimiento para que el jugador del cadete B del Barça no siguiera siendo alineado. La prensa catalana habló entonces de una mano negra. Aseguraba que, con la gran cantidad de jóvenes futbolista que están en esa misma situación en Cataluña, la única razón por la que se habían fijado en Seung Woo Lee se debía a que otro club hubiera denunciado esa situación ante el máximo organismo futbolístico internacional.
A partir de aquí, las investigaciones que se han resuelto con la sanción al Barcelona versaron sobre varios menores inscritos en el club y que participaron en torneos durante varias temporadas entre 2009 y 2013. Entre ellos están los coreanos Paik Seung-Ho y Jang Gyeolhee, el francés Chendri, el nigeriano Adekanye y el camerunés Sousia. Se desconoce el nombre de cuatro jugadores más, aunque se trata de un joven francés, un guineano, un estadounidense y un holandés.