Máxima emoción en la eliminatoria que enfrenta a Córdoba y Murcia, ambos con el objetivo de alcanzar la gran final del playoff de ascenso a Primera División. El conjunto murciano fue mejor en la primera mitad, pero los locales perdonaron la vida a su rival en el segundo acto. Pelayo abandonó el campo con una fractura en un codo.
El Murcia de Julio Velázquez arrancó el partido con mejores sensaciones que su rival, se mostraron como un equipo muy seguro e hicieron mucho daño en ataque al equipo andaluz. Las acometidas de Saúl Berjón y Wellington desestabilizaron a la zaga cordobesa que se vio superada en varias ocasiones. Aún así, la velocidad de un Saúl inspirado no fue efectiva a la hora de asistir a sus compañeros. Otro de los pesos pesados del Murcia, Kike García, tampoco tuvo su día de cara a gol pese a sus constantes intentos y su buenas maniobras.
Las mejores oportunidades en los primeros 45 minutos fueron para Saúl, Dorca y Eddy, pero ninguna llegó a buen puerto y Juan Carlos, portero del Córdoba, no tuvo que recoger ningún balón del fondo de la portería. El portero rival, Casto, apenas tuvo trabajo y se sintió muy seguro ante la falta de profundidad de los locales.
En la segunda mitad todo cambió y el Córdoba ofreció su mejor versión aunque sin puntería. El equipo de Albert Ferrer no encontraba opciones de ataque con el balón a ras de césped y probó con balones aéreo a la espalda de la defensa. Acertaron de pleno. De esa forma llegaron las mejores oportunidades andaluzas con Pedro, Uli Dávila y Juanlu como referencias.
Una de las ocasiones mas clara la tuvo Arturo con un remate que sacó bajo palos Mauro y desesperó a la parroquia local. Posteriormente y en los minutos finales, Xisco se encontró con el poste para desgracia cordobesista. El luminoso no tuvo cambios y la Nueva Condomina dictará sentencia.