El Athletic Club, que este martes jugará en Nápoles la ida del play-off de acceso a la fase de grupos de la Liga de Campeones, ha superado las seis previas europeas que ha disputado para meterse en el cuadro final de torneos continentales.
La primera de ellas fue hace 16 años, en la Champions de la temporada 1998/99, frente al Dinamo de Tiflis. El equipo dirigido de Luis Fernández perdió por 2-1 en Georgia, pero el gol del ahora delegado Andoni Imaz mantuvo vivo a un Athletic que remontó en San Mamés con un recordado tanto de Joseba Etxeberria que permitió al conjunto bilbaíno jugar por primera vez en su historia en el actual formato de la Copa de Europa.
Once años más tarde, en el verano de 2009 y tras ser subcampeón de Copa, el Athletic tuvo que superar dos cruces para disputar la Liga Europa. En el primero de ellos sufrió para apear al Young Boys suizo, ya que perdió en San Mamés (0-1) y remontó sobre la hierba artificial de Berna (1-2) con goles de Fernando Llorente e Iker Muniain.
También lo pasaron mal los leones ante el débil Tromso, al que derrotaron por 3-2 en San Mamés antes de arrancar un agónico empate en Noruega (1-1) que le dio el pase a los de Joaquín Caparrós.
La eliminatoria más plácida, sin duda, fue la de la Liga Europa del curso 2011/12 en la que precisamente el Athletic acabaría jugando la final de Bucarest frente al Atlético de Madrid. Después de empatar sin goles frente al Trabzonspor en La Catedral, en el debut de Marcelo Bielsa en el banquillo bilbaíno, tanto su rival como el Athletic siguieron adelante. La UEFA canceló el partido de vuelta 24 horas antes de su disputa porque una sanción al Fenerbahce posibilitaba el ascenso del Trabzonspor a la Champions.
Hace dos años, el conjunto vizcaíno superó también dos eliminatorias, ambas con relativa solvencia, para jugar la fase de grupos de la Liga Europa. Primero dejó en la cuneta al Slaven croata, después de ganar por 3-1 en Bilbao y perder por 2-1 en Croacia; y posteriormente al HJK Helsinki, al que goleó en San Mamés (6-0) antes de empatar (3-3) en la vuelta disputada en la capital finlandesa.