Después de que la Federación Española de Fútbol (RFEF) apostase fuerte por contar con sus servicios y surgiese un conflicto con la Confederación Brasileña, Diego Costa tomó la decisión de jugar para España porque era el país en el que se había dado a conocer en el mundo del fútbol. Seis meses después, su compromiso con el combinado de Vicente del Bosque está en cuestión.
La polémica ha surgido después de que el seleccionador haya optado por dejar fuera al delantero de la convocatoria para el encuentro de clasificación ante Bielorrusia para la próxima Eurocopa de Francia 2016 y el amistoso ante el combinado de Alemania. Del Bosque alegó que era necesario cuidar al ariete y no forzar los problemas físicos que arrastra, aunque no le han impedido jugar los últimos partidos con su equipo. El primero en felicitar al seleccionador por la decisión fue Jose Mourinho, entrenador del Chelsea, que se había quejado amargamente por las últimas convocatorias y había afirmado que el jugador no podía disputar más de un partido semanal.
Sin embargo, Sergio Ramos, uno de los capitanes de la selección, que ha tenido que aclarar las declaraciones en las que dejaba entrever que existía falta de compromiso del delantero y su compañero de equipo Cesc Fábregas, que tampoco acudirá a la cita por problemas musculares. El andaluz aseguró este miércoles que ambos debían haber dado explicaciones y un día después matizó sus declaraciones tras ver el revuelo generado.
"Como capitán soy el menos indicado para hablar de temas delicados. Tengo mi opinión, que no voy a dar, son acuerdos del seleccionador con los jugadores. Yo la última vez vine, me hice una prueba y no estaba para jugar para una roturita en el sóleo, pero hay veces que he jugado con molestias. Va en el ADN del jugador", afirmó.
Según apunta el diario As, existe malestar entre algunos de los futbolistas del equipo nacional por lo que entienden como una falta de compromiso. La información apunta al enfado de Iker Casillas y el propio Ramos por las ausencias en un momento delicado para un conjunto que está en plena reconstrucción tras el fracaso en el pasado Mundial de Brasil. Por su parte, Vicente del Bosque ha tratado de apaciguar los ánimos y ha reiterado que no existe falta de compromiso en ningún jugador. La transición tras el Mundial de un equipo que lo ha ganado todo no está siendo fácil.