Menú

El castigo a Piqué podría ser de cuatro a doce partidos

Según el Código, es un acto "grave" y podría ser sancionado de entre cuatro y doce partidos. A Ramos le cayeron cinco.

No es la primera vez que Gerard Piqué tiene un problema con el árbitro Velasco Carballo. Del mismo modo que no es la primera vez que un jugador del Barcelona es expulsado por protestarle algo al colegiado durante un partido.

Sin ir más lejos, el último fue el lateral zurdo Jordi Alba. Ocurrió en la jornada número 33 de la pasada temporada. Entonces, al poco de comenzar la segunda parte, Jordi Alba vio primero una amarilla por protestar una acción en campo contrario. No cesó en su empeño y Mateu Lahoz, ábitro de ese partido, un derbi Espanyol – Barcelona, le sacó roja directa y le mandó de vuelta a los vestuarios.

Expulsión "premeditada"

No están acostumbrados en el conjunto azulgrana a que alguno de sus jugadores vea el camino de los vestuarios por protestas. Aunque el precedente en el caso de Piqué con el colegiado de la Supercopa de España, Velasco Carballo, es distinto.

Para entonces, tenemos que remontarnos al 3 de marzo de 2012, cuando el central del Barcelona fue expulsado por roja directa en un partido en casa ante el Sporting por derribar a De las Cuevas cuando era el último hombre. Entonces, Piqué dijo que esa expulsión fue "premeditada" en relación a unas protestas anteriores: "Se lo tomó mal y entonces ya estaba esperando una oportunidad para expulsarme", dijo al finalizar ese encuentro.

Aún así, el Comité Técnico de Árbitros decidió archivar el caso y sólo fue sancionado por su roja y no vio castigo alguno por sus declaraciones.

El precedente de Sergio Ramos

Pero esta vez parece que ese "me cago en tu puta madre" que dijo el jugador sí tendrá castigo. Entre cuatro y doce partidos podrían caerle, en función de si se entiende como grave. Algo que ya le ocurrió, por ejemplo, a Sergio Ramos.

Fue en enero de 2013 cuando el central del Real Madrid se dirigió a Ayza Gámez en un partido de copa ante el Celta diciendo, según el acta, "sinvergüenza" hasta en tres ocasiones, y otras dos más "llevas todo el puto día jodiéndonos". A él sí le cayó la gravedad que se recoge en el artículo 94 del Código Disciplinario por el que "insultar, ofender o dirigirse en términos o actitudes injuriosas al árbitro principal se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos".

A Sergio Ramos le cayeron cinco partidos, aunque uno de ellos fue por la roja. Es decir, cuatro por los insultos.

Como se desprende de este Código, se hace referencia al árbitro principal, aunque también podría ir dirigido al linier. Además, sea la sanción que sea, se tendría que cumplir en Liga. Y entre esos encuentros, en caso de caerle sólo el mínimo, cuatro, se perdería las visitas a San Mamés y Calderón, primera y tercera jornada, y los partidos en casa ante el Málaga y el Levante.

Temas

En Deportes

    0
    comentarios