El Mirandés y su técnico Carlos Terrazas están revolucionando Segunda División y eso que sus resultados están siendo discretos en el inicio de la Liga Adelante. Un empate a uno ante el Zaragoza y una derrota por 1-0 ante Osasuna en Pamplona conforman el balance del equipo de Anduva.
El equipo burgalés está llamando mucho la atención en la categoría de plata y no es por resultados, pero sí por el esquema utilizado en los partidos. Terrazas está usando un 1-3-3-3-1 con su equipo. No es algo habitual y menos en España y al más alto nivel. Tres defensas, tres hombres en el centro, otros tres por delante y arriba, como único punta, su delantero referencia.
En la zaga, los tres hombres suelen ser centrales y los críticos hablan de los posibles pasillos que deja el equipo en las bandas al tener tres zagueros centrados, pero por el momento no le están generando muchas ocasiones y llegadas por bandas pese a haberse enfrentado a dos candidatos al ascenso: Zaragoza y Osasuna.
En el segundo partido ante los navarros se vio la variante del esquema utilizado en la primera jornada y Carlos Terrazas utilizó un 1-3-4-3 con un rombo en el centro del campo. Cuando se utiliza este esquema Lago Junior deja de ser la referencia mientras que con el 1-3-3-3-1, el delantero de Costa de Marfil es el encargado de ser la punta de lanza de un esquema muy novedoso.
Terrazas pasó por los micrófonos de Movistar+, cuyo programa Planta Segunda analizó su sistema, y no termina de aceptar el esquema que muchos le atribuyen: "Nosotros no jugamos por líneas. Las numeraciones no van con nosotros. Jugamos de manera discontinua. Llevamos tiempo así, llevó año y medio y vamos evolucionando nuestro juego".