El Cádiz, equipo de Segunda B, partió a primera hora de este martes hacia Canarias para medirse hoy con el CD Mensajero, de la misma categoría, en la segunda ronda de la Copa del Rey.
Hasta ahí todo normal. Siempre es un incordio -tanto económico como físico- para un equipo de la categoría de bronce, tener que desplazarse a la isla. Sin embargo, en está ocasión el incordio se ha transformado en odisea. Y es que el Cádiz, para llegar a su destino, se ha visto obligado a realizar un viaje infernal. Sin vuelos directos, hasta tres aviones con sus pertinentes escalas y horas muertas de aeropuertos, se ha tenido que comer la expedición cadista.
El pasado domingo el conjunto andaluz avisó a la Federación de su incapacidad para desplazarse a La Palma al no haber podido encontrar vuelos, solicitando una solución al ente federativo.
Por lo que parece, desde la Federación se han puesto creativos, y han ofrecido una solución al conjunto que entrena el mítico Claudio Barragán. Finalmente, la expedición del club cadista comenzaba su viaje partiendo a las 8:30 de la mañana de ayer desde el aeropuerto de Jerez de la Frontera hasta el de Madrid-Barajas.
Tras almorzar en el propio aeropuerto madrileño, el equipo amarillo ha tomado a primera hora de la tarde un enlace aéreo Madrid-Tenerife Norte. A las 19:00 los jugadores se ejercitaron en la Ciudad Deportiva del CD Tenerife.
El último vuelo lo ha hecho hoy mismo, al desplazarse a primera hora desde Tenerife hasta La Palma. Este encuentro, de eliminatoria a partido único, está previsto para las 17.00 de la tarde (hora insular) en el estadio Silvestre Carrillo de Santa Cruz de La Palma.
La Copa del Rey le sale cara al conjunto gaditano.