Hay mucho lío en torno al mejor tercero que consigue billete directo a la Eurocopa. Ultimamente la UEFA ha utilizado un baremo especial en cada clasificación y, en algún caso, ni siquiera ha tenido que ejercer este baremo porque se han metido en una fase final las dos primeras de cada grupo. Este año el máximo organismo ha decidido premiar a la mejor tercera de grupo con la Eurocopa de naciones y que sean 19 clasificadas directas además de Francia. De este modo las dos primeras de cada grupo (hay 9 grupos, es decir 18) y la mejor tercera son selecciones clasificadas. Las otras cuatro (hasta que sumen 23, la 24 será la anfitriona Francia) saldrán de la repesca que juegan las otras ocho selecciones que han quedado en tercer puesto.
Para ese mejor tercer puesto la UEFA no mira los puntos conseguidos, sino que hace un baremo que consiste en restar los puntos que cada tercera ha conseguido ante la última clasificada del grupo. Por eso, Hungría es la mejor tercera aunque, por puntos, no lo sea. Sin embargo la selección magiar sólo consiguió un punto ante la colista que, sorprendentemente, fue Grecia. Eso ha hecho que a sus 16 puntos se le reste sólo uno y se queda con 15. En la jornada de este martes hay una opción de que Hungría caiga de ese honor. Si Turquia gana a Islandia es tercera con 18 y si en ese grupo Kazajistan vence en Letonia, la selección báltiica sería última y en ese caso los turcos serían el mejor tercero, al restarles sólo dos puntos (16)
Todo esto debido a que hay un grupo de cinco selecciones, el que forman Portugal, Albania, Dinamarca, Serbia y Armenia. La UEFA equipara, de esta manera, todos los grupos y mira en términos clasificatorios como si todos los grupos estuvieran formados por cinco selecciones
Otros equipos han hecho mejor clasificación pero han ganado los seis puntos a la colista y le restan, de esa forma, más. La situación, paradojicamente, ha beneficiado a los húngaros por lo que este sistema de elegir a la mejor tercera no acaba de convencer a muchos miembros de la competición.
Hungría, por tanto, volverá a un gran torneo, ese al que falta desde 1986, año en el que jugó el Mundial de Mexico. Todo si la carambola turca no se produce, entonces serán los otomanos los que se clasifiquen directo.