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La misteriosa y macabra 'maldición' del gafe del gol

A Aaaron Ramsey le acompaña una macabra casualidad. Cada vez que que marca un gol, muere un personaje célebre.

A Aaaron Ramsey le acompaña una macabra casualidad. Cada vez que que marca un gol, muere un personaje célebre.
Aaron Ramsey | EFE

A Aaron Ramsey, centrocampista galés del Arsenal, le acompaña una macabra coincidencia. Cada vez que el talentoso jugador 'Gunner' marca un tanto, un personaje célebre tirita de miedo.

Ramsey, que no destaca precisamente por su olfato de gol -es un centrocampista de más ida y vuelta, con una gran capacidad para el trabajo de presión y más asistente que goleador- 55 goles en toda su carrera, tiene una estadística demoledora: Cada 3 goles del galés, muere una persona famosa con un margen, a lo sumo, de tres días. En total son 18 las víctimas del cenizo del gol. Un 33% de sus tantos conlleva una fatídica muerte.

La 'maldición' se inició el 16 de octubre de 2009, cuando Ramsey consiguió su primer gol como internacional con la selección de Galés ante Liechtenstein. Dos días más tarde, el reconocido periodista deportivo español Andrés Montes, fallecía.

Ramsey marcó para su país en el duelo ante Escocia el 16 de noviembre de 2009, y el exfutbolista Antonio De Nigris perdía la vida horas más tarde por un paro cardíaco.

La serie de muertes que siguieron la relación causa-efecto del gol de Ramsey siguió su curso incrementándose. Así, en 2001 Bin Laden, Steve Jobs y Al-Gaddafi partieron de este mundo después de un tanto de Ramsey. En 2012 le tocó el turno a Chavela Vargas y en 2014 Robin Williams. Otras de las 'víctimas' del asesino del gol han sido: Whitney Houston, Bebo Valdés, Jorge Rafael Videla, Ken Norton, Paul Walker, Huracán Carter, HG Higer, Eduardo Galdeano, Gunter Grass.

La maldición del 'destripador del gol' se acrecienta

La 'maldición de Ramsey' vivió un nuevo capítulo con la muerte del actor británico Alan Rickman. El pasado miércoles Ramsey marcaba uno de los goles del trepidante partido entre el Liverpool y Arsenal (3-3). Al día siguiente se conocía la fatídica noticia de la muerte de Rickman. El lunes pasado el joven jugador del equipo del este de Londres anotaba y al día siguiente falleció el icono de la música David Bowie.

Conste que se trata de una mera casualidad, y que al bueno de Ramsey no se le puede achacar nada, pero no es menos cierto que la 'maldición del asesino del gol', está más vigente que nunca.

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