"Siempre es agradable marcar pero esto no es lo más importante. Lo que quería era divertirme", comento Didier Drogba después de anotar un tanto y dar otra asistencia en el primer partido que jugó con su nuevo equipo, los Phoenix Rising.
El equipo del costamarfileño ganó por 2-1 a los Vancouver Whitecaps y él fue el autor del 1-0 en el minuto 40. Posteriormente daría una asistencia a su compañero y también exjugador del Chelsea, Shaun Wright-Philips.
Drogba sigue demostrando su capacidad goleadora y esta vez fueron 7.000 personas las que asistieron en EEUU a su reaparición en los terrenos de juego.