El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) ha decidido ratificar la sanción de cinco partidos de suspensión a Cristiano Ronaldo, que el pasado 13 de agosto, en la ida de la Supercopa de España ante el FC Barcelona (1-3), propinó un leve empujón al árbitro De Burgos Bengoechea después de que éste le expulsara mostrándole la segunda amarilla.
Al día siguiente, el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) impuso a Ronaldo esa sanción de cinco partidos —cuatro por empujar a De Burgos y uno por la expulsión—, que a su vez fue ratificada por el Comité de Apelación. Fue entonces cuando el propio jugador estalló y, en un mensaje publicado en su cuenta de Instagram, habló de "persecución" en su contra.
"¡Imposible quedar inmune ante esta situación, cinco partidos! ¡Me parece exagerado y ridículo, esto se llama persecución! Gracias a mis compañeros y a los aficionados por el apoyo", fueron las palabras del portugués.
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Ahora, una semana después, el TAD —última instancia de la justicia deportiva en España— ha decidido ratificar ese castigo, desestimando así el recurso presentado por el Real Madrid.
Cristiano ya ha cumplido dos de esos cinco partidos —en la vuelta de la Supercopa ante el Barça y en la primera jornada de LaLiga Santander frente al Deportivo en Riazor (0-3)—, por lo que aún le quedan tres encuentros más pendientes: ante Valencia, Levante y Real Sociedad.
El luso, que reaparecerá con la camiseta del Real Madrid el próximo día 12 o 13 de septiembre, en la primera jornada de Champions, regresará a la competición española una semana después, el miércoles 20 de septiembre, en el partido de la quinta jornada de Liga frente al Betis en el Santiago Bernabéu.