La selección vasca vuelve a ser el centro de la polémica deportiva en la comunidad que preside Patxi López, como viene siendo habitual en los dos últimos años, en los que, desde finales de noviembre, se han producido importantes diferencias entre los jugadores y la Federación regional, lo que ha hecho que no se haya disputado el tradicional partido de Navidades de la selección vasca desde 2007.
Hasta ese año, el combinado autonómico había venido jugando sus partidos bajo el nombre de Euskadi. En 2007, por primera vez en la historia y a petición de los jugadores, el combinado se enfrentó a la selección regional catalana bajo el nombre de Euskal Herria en San Mamés. Ese cambio de nombre, de clara pretensión independentista, abrió una agria polémica que todavía está vigente.
En 2008, varias decenas de jugadores vascos, entre los que se encontraban futbolistas que jugaban en el Athletic Club, Real Sociedad, Alavés, Eibar, Mallorca, Hércules o Castellón (pinche aquí para conocer sus nombres) advirtieron que sólo iban a jugar con el combinado nacional si éste disputaba el encuentro bajo el nombre de Euskal Herria. La Federación vasca, que quería volver al nombre de Euskadi, no aceptó, y no hubo partido. En 2009 no hubo ni comunicados, directamente no hubo acuerdo entre los futbolistas, que no cambiaron su pretensión, y la federación deportiva vasca.
Este miércoles, en un comunicado escrito únicamente en vascuence y remitido únicamente al diario Gara, altavoz habitual de la organización terrorista ETA y no precisamente el periódico más leído del País Vasco, futbolistas vascos bajo la firma de "Euskal Herriko Futbolariak" (Futbolistas de Euskal Herria) mostraron su disposición a disputar el partido navideño de la selección regional, aunque dejando claro, eso sí, que no han llegado a ningún acuerdo de la Federación vasca.
Estos futbolistas, que no aportan sus nombres, aunque no deberían variar demasiado de los que ya firmaron el comunicado de 2008, acusan al organismo futbolístico regional de tener el único objetivo de "recaudar dinero", y censuraron que no quiera dar "pasos hacia la oficialidad". Según dicen, han decidido jugar el encuentro para demostrar que realmente tienen el deseo de vestir la camiseta vasca y, de paso, evitar "malas interpretaciones".
"Para ellos, jugar en Navidad sirve para cuadrar las cuentas y punto. No es ése nuestro objetivo, pero para conseguir el nuestro hay que jugar partidos y los organizan la Federación", ha declarado en Zubieta el central de la Real Sociedad Ansotegi, quien ha asegurado que es una gran noticia que se vuelva a jugar "para ilusionar a la gente".
Las primeras reacciones a este comunicado, pero, llegaron desde Lezama, donde se encuentra la ciudad deportiva del Athletic Club. Uno de los capitanes del equipo bilbaíno, Pablo Orbaiz, dijo que la plantilla está contenta de que este año vuelva a disputarse el partido navideño de la selección vasca. "Me parece una buena noticia. Yo también me he enterado esta mañana y esperemos que vuelva a ser una fiesta para todos", explicó.
El centrocampista del Athletic consideró que el hecho de que se juegue ese partido "es beneficioso para todos". "La esperanza nunca se pierde. A los jugadores lo que nos gusta es jugar a fútbol y todos los que hemos jugado este partido sabemos que es un día bonito, un día especial y en el que se forma un gran ambiente. Entonces, creo que es beneficioso para todos", apuntó.
En parecidos términos se expresó también otro de los futbolistas de la plantilla bilbaína, Markel Susaeta: "Creo que es importante para nosotros y para todos el hecho de que haya un partido de Euskal Herria. Es bueno para nosotros y para todo el fútbol".
Aún se desconoce la fecha en la que se podría disputar el partido, que podría ser el 28 o el 29 de diciembre, y el rival, aunque todo indica que será o la Camerún de Samuel Eto'o, dirigida por Javier Clemente, o la Gales de Gareth Bale, cuyo seleccionador es John Benjamín Toshack, con quien existen buenas relaciones.