LD (EFE) El duelo entre los equipos angelinos no fue el mejor espectáculo deportivo de la jornada dominical, pero los Lakers vencieron 88-85 a los Clippers para seguir en la lucha por la mejor marca de la liga.
Después que los Cavaliers recuperaron su condición de equipo ganador e intratable en su campo del Quicken Loans Arena, donde se impusieron por 101-81 a San Antonio, los Lakers llegaron al Staples Center con la obligación y necesidad de conseguir la victoria.
El rival era nada menos que el tercer peor equipo de la liga, por lo que se esperaba que todo fuese un paseo para los Lakers, y así sucedió al menos en el primer cuarto con un parcial de 30-17. Pero una vez más llegó la inconsistencia en el juego de los Lakers y sobre todo la falta de dominio bajo los aros. Un sufrimiento que se transformó en dramatismo cuando a 1:08 para concluir el tiempo reglamentario, el base novato Eric Gordon anotó dos tiros libres y puso el marcador parcial en 83-82, a sólo un punto de empatarlo.
Pero en la siguiente posesión surgió la figura del pívot español Pau Gasol, que hizo una penetración perfecta a canasta para poner el parcial de 85-82 que iba a ser decisivo con dos puntos más que Bryant logró desde la línea de personal.
El triple de Gordon mantuvo la emoción hasta el final porque con el parcial de 87-85 y cinco segundos por jugarse el base Derek Fisher acertó con sólo un tiro de personal. Los Clippers tuvieron la oportunidad de forzar la prórroga, pero el base Baron Davis, la gran frustración y decepción esta temporada del equipo falló un intento de triple.
Los Lakers respiraron se llevaron la victoria, la tercera consecutiva, para dejar su marca en 61-16, un juego menos que los Cavaliers (62-15), que siguen con la mejor de la liga. El alero Lamar Odom con un doble-doble de 18 puntos y 10 rebotes lideró el juego de los Lakers, que también tuvieron el apoyo de Bryant con 18 puntos (5-15, incluidos 3-6 triples, y 5-8 desde la línea de personal). Gasol se mantuvo en su línea de jugador más completo de los Lakers al aportar 14 puntos con nueve rebotes y cuatro asistencias, en 36 minutos que estuvo en el campo, el que más del equipo.
Se acabó la última ilusión que tenían los Toronto Raptors de estar en la fase final del campeonato después de perder por 103-112 ante los Knicks y romper una racha de seis triunfos consecutivos, la mejor de la temporada.
Esta vez el ataque de los Knicks, que la jornada anterior habían perdido por 95-102 en su campo del Madison Square Garden, fue superior, especialmente en el segundo periodo cuando lograron parcial de 20-32 y se apoderaron del ritmo del partido. Irónicamente, la derrota de los Knicks en Nueva York les costó la eliminación de la fase final y le devolvieron la misma moneda a los Raptors en su visita al Canada Air Centre, de Toronto.
José Manuel Calderón tampoco brilló como lo había hecho en el partido de Nueva York y se quedó con 12 puntos y seis asistencias. El base español jugó 35 minutos para anotar 6 de 13 tiros de campo, falló un intento de triple, capturó un rebote, recuperó un balón y lo perdió dos veces.