El ex preso y futbolista palestino Mahmoud al Sarsak ha rechazado la invitación del Barcelona para acudir a ver en directo el próximo clásico ante el Real Madrid del domingo. El motivo es la presencia en el Camp Nou de Guilad Shalit, cautivo en manos de Hamás durante cinco años en la franja de Gaza y que celebrará su primer año en libertad disfrutando del fútbol.
Sarsak ha explicado a France Press que compartir palco con Shalit sería "un acto de normalización" con Israel y, por ello, "no aceptaré a menos que la Autoridad Palestina me dé permiso", informa desde elmundo.es Sal Emergui.
El portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri, ha llamado a hacer un boicot contra el Barcelona por la presencia de Shalit: "Pedimos a todos los medios musulmanes, árabes y palestinos no retransmitir este partido si Shalit asiste".
El Barcelona invitó al clásico a Shalit, gran aficionado al deporte y que expresó su interés en presenciar el partido. Al conocerse la invitación, los máximos representantes de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en España y grupos como Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) exigieron una rectificación a Sandro Rosell: "No es un simple ciudadano israelí sino un sargento mayor de las Fuerzas de Defensa israelíes, un Ejército que desde el 67 ocupa ilegalmente los territorios palestinos de Jerusalén este, Cisjordania y la Franja de Gaza así como el territorio sirio de los Altos del Golán".
El club rápidamente emitió un comunicado en el que la entidad aseguraba que siempre había mediado por la paz en Oriente Medio y aseguró que no habían invitado a Shalit "sino que el club aceptó su petición de presenciar un partido desde una localidad del estadio coincidiendo con su visita a Barcelona".
El club, asimismo, indicó que también había palestinos invitados a presenciar el choque: "Solicitud de la embajada palestina pidiendo tres invitaciones para Musa Amer Odeh, embajador de la Autoridad Palestina, Jibril Rajoub, presidente de la Unión Palestina de Fútbol, y el futbolista palestino Mahmud Al Sarsak".
En el último capítulo de esta polémica, el futbolista ha declinado la invitación del Barcelona: "Como preso liberado, futbolista del equipo nacional palestino y gran seguidor del F.C. Barcelona, condeno profundamente su decisión de invitar al soldado israelí Gilad Shalit a uno de sus partidos y les pido que anulen esta decisión", escribe Sarsak que habla de "casi 5.000 presos políticos cautivos en las cárceles israelíes".