La mejor manera de recordar a quienes ya no están es demostrar que la idea en la que creían sigue viva. El FC Barcelona no pudo realizar una mejor dedicatoria para el recientemente fallecido Tito Vilanova que sacar una trabajada victoria de Villarreal (2-3), en la que remontaron dos goles en contra y se aferraron a la lucha por la Liga.
Fue una demostración más de orgullo y pundonor que de fútbol porque los azulgranas volvieron a evidenciar serios problemas defensivos y estuvieron a punto de naufragar ante el eléctrico equipo de Marcelino García Toral, que solo bajó el ritmo de sus contras cuando se le acabó la batería.
Comenzó dominando el Barça, haciendo suyo el balón, pero las transiciones rápidas y la fluidez de ideas se agotaron transcurrida la primera hora. En esos 30 primeros minutos el Villarreal decidió esperar, mantenerse agazapado, mientras el conjunto azulgrana alternaba por la frontal del área pero terminaba atascado en el último pase. Y el Villarreal comenzó a soltar zarpazos en forma de contragolpes, ejecutados por la excelente gama de pasadores y velocistas con los que cuenta en plantilla.
Volvieron los viejos vicios de este año en los azulgranas que, quizá descentrados por las emociones de esta semana, acabaron pecando de una indolencia que estuvo a punto de dejarles fuera de la lucha por la Liga. Como en otros encuentros, las posesiones se tornaron estériles y los castellonenses empezaron a robar con más facilidad. Llegó entonces un intercambio de golpes que acabó enviando a la lona a los visitantes.
Pudo adelantar Xavi a su equipo en una buena internada de Alexis por la banda derecha. Los barcelonistas eran capaces de tocar con facilidad cerca del área de su rival y el chileno llegó hasta la línea de fondo para servir un balón al centrocampista, cuyo disparo rebotó en la defensa. Sin embargo, lo que llegó fue un golpe certero para los barcelonistas. Avisó Aquino con un balón que sacó bajo palos Bartra y no falló Cani en un contragolpe perfecto lanzado por Jonathan Pereira justo antes del descanso.
Dos goles en propia puerta
Apenas hubo tiempo para reordenar ideas cuando los desajustes defensivos volvieron a abrir la herida del Barça. Cani, un jugador capaz de cambiar el ánimo de cualquier equipo, encontró un desierto verde en la banda izquierda de los visitantes, en la que apareció Aquino para poner un centro medido a la llegada de cabeza de Trigueros. El centrocampista conectó un cabezazo tan lejano como ajustado para batir a Pinto y dejar a los de Martino tocados.
Sin embargo, el balón volvió a ser de los visitantes y donde no llegó el acierto de cara a portería para fabricar ocasiones -algo cada vez más habitual en el equipo- llegó la suerte. Solo así se puede explicar que, primero Gabriel y después Musacchio rematasen en su propia portería sendos centros de Alves para igualar el choque. Y la buena suerte se juntó con las ganas de los azulgranas de remontar.
Asenjo se lució en una falta lanzada por Messi pero no pudo hacer nada ante la mejor jugada del conjunto foráneo. El Villarreal se quedó sin fuerzas, dio un paso atrás y acabó absorbido. Busquets dibujó un pase elevado para que Cesc bajase el balón con la cabeza dentro del área y Messi definiese ante el guardameta. Fue una celebración emotiva, mirando al cielo, para dejar claro que este Barça, que hasta el pasado verano era el de Tito Vilanova, sigue creyendo en sí mismo.
Ficha técnica
Villarreal, 2: Asenjo; Mario, Musacchio, Gabriel, Jokic; Bruno, Pina (Aquino, m. 35), Trigueros, Cani; Giovani (Uche, m. 83) y Perbet (Jonathan Pereira, m. 13).
Barcelona, 3: Pinto; Alves, Mascherano, Bartra, Adriano; Busquets, Xavi (Tello, m.62), Iniesta; Alexis (Cesc, m. 62), Messi y Pedro (Sergi Roberto, m. 90).
Goles: 1-0. Min.45: Cani. 2-0. Min.55: Trigueros. 2-1. Min.65: Gabriel, en propia puerta. 2-2. Min.78: Musacchio, en propia puerta. 2-3. Min. 83: Messi.
Árbitro: Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Amonestó a los locales Mario (m. 55), Trigueros (min. 87) y Cani (m. 90); así como a los visitante Alexis (m. 50), Busquets (m. 86) y Dani Alves (m. 91).
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo quinta jornada de la Liga disputado en el estadio El Madrigal ante 20.000 espectadores. Se guardó un emotivo minuto de silencio en memoria del exentrenador del Barcelona Tito Vilanova, fallecido el viernes víctima de un cáncer.