La liga ha actuado y no le ha temblado el pulso. Han sido contundentes con Augusto César Lendoiro, al que han destituido fulminantemente tras aparecer en el entierro de Jimmy de este martes.
Lendoiro, que era el embajador de la LFP desde el pasado 8 de mayo, cuando Javier Tebas le nombró en ese cargo, pierde ese puesto de manera fulminante tras ser visto en el entierro abrazando y consolando a ultras del grupo Riazor Blues, al que pertenecía el fallecido.
Mientras el fútbol español trata de alejarse de los ultras, incluso la actual junta directiva del Dépor ha evitado acudir al entierro, Lendoiro, que estuvo 25 años al frente del club gallego, sí se ha dejado ver junto a ellos y dejando muestras de cariño.
"No podemos permitir que, en un momento como este en el que condenamos cualquier acto de violencia y estamos luchando duramente, un representante de la Liga se deje ver con esta gente. Que no olvide que nosotros no aceptamos guardar un minuto de silencio. Y ahora va él y se deja ver", declaró Javier Tebas a La Voz de Galicia.
El presidente de la LFP, Javier Tebas, ha adoptado esta decisión al considerar que el cargo honorífico que ostenta Lendoiro no es compatible con los ideales de una institución que lucha contra la violencia en el deporte y el racismo y que ha condenado los incidentes protagonizados por los Riazor Blues en la capital, según han informado fuentes de la Liga.
La presencia a título individual de Lendoiro en el entierro del hincha fallecido "no procede" en el caso de una persona que representa a la LFP y va contra la imagen de juego limpio y respeto que defiende la institución.