Reacción inmediata. Esa es la intención de los jugadores del Atlético de Madrid. La plantilla rojiblanca es consciente de que la imagen del equipo no fue la mejor tanto en Vigo (2-0) como en Leverkusen (1-0) y quiere recuperar la mejor versión que ofreció en el derbi ante el Real Madrid. No hubo gabinete de crisis, pero sí conjura de cara a recuperar las mejores sensaciones del campeón liguero.
Incluso en el Bay Arena, los jugadores tomaron rápidamente la iniciativa para sacar adelante los objetivos del curso. En el propio césped, los futbolistas rojiblancos decidieron, como bien comentó Moyá, que había que cerrar el resultado en 1-0 para tener opciones de remontada en el Calderón. Con ese reto cumplido, en el vestuario se habló de pasar la eliminatoria en Madrid, sin dudar de ello.
No hay preocupación dentro de un vestuario que ha basado sus éxitos en una unión muy fuerte en el campo y fuera de él. No ha habido reproches, tampoco reprimendas, simplemente han cerrado filas en busca de un mejor rendimiento. No hay crisis, pero tampoco quieren esperar a que pueda haber alguna.
En las próximas semanas, el Atlético de Madrid se enfrentará a Sevilla, Valencia, Espanyol y Bayer Leverkusen. Dos partidos en casa y dos fuera del Calderón. No pueden fallar y la plantilla lo sabe. La pelea por la Liga y por la Champions pasa por ganar estos cuatro partidos, pensando día a día y partido a partido.
Los capitanes, Gabi, Raúl García y Godín, han ejercido su condición de líderes para arengar a la plantilla de cara los próximos compromisos que les esperan. Desde el cuerpo técnico tampoco hubo reproches, todo lo contrario. Nadie duda de que pueden remontar al Bayer Leverkusen, desde el presidente al último aficionado, pero primero han pedido máxima concentración en los tres choques ligueros que llegarán de forma consecutiva. Cerrar la tercera plaza es la prioridad, ese es el mensaje lanzado en el vestuario, y la posibilidad de luchar por el título debe ser un premio posterior a cumplir dicho objetivo.
La vuelta de Koke, que podría forzar ante el Sevilla, también ha servido de aliciente para el Atlético de Madrid.