Las causas judiciales no dejan de acumularse en las oficinas del FC Barcelona. Este lunes el conjunto azulgrana tendrá que enfrentarse a una nueva causa judicial por la explotación publicitaria de la fachada de la nueva Masía, el edificio en el que se alojan los jugadores de las categorías inferiores.
Cuando se puso en marcha el proyecto, fue Joan Laporta quien firmó con la empresa Muro Cortina Modular (MCM) un acuerdo por el cuál se encargaría de construir el edificio, vender un solar propiedad del club y de la explotación de la publicidad a través de leds que iba a lucir la fachada del complejo. Sin embargo, los planes del club cambiaron cuando Sandro Rosell llegó a la presidencia.
En ese momento, siempre según la versión de MCM, se rompió el acuerdo firmado previamente sobre la explotación publicitaria, por lo que la empresa decidió demandar al Barça y solicitar una indemnización de 99,3 millones de euros. El juzgado de instancia número 25 de Barcelona será el lugar: desde el lunes hasta el miércoles comparecerán Laporta y Rosell para verse las caras con MCM. En el banquillo de la compañía estará Mario Conde, contratado como abogado de MCM, dispuesto a conseguir una indemnización millonaria y otro problema más para el club azulgrana.