Aguas turbias bajan por el Arcángel. El Córdoba C.F pasa por un momento deportivo muy delicado. 19 con 27 puntos, ocupan puestos de descenso a Segunda 'B'. Los de Luis Carrión disputan este fin de semana un duelo vital en su lucha por la permanencia. Visita el Arcángel un rival directo, el C.D. Alcorcón -los de Julio Velázquez son 15º con 31 puntos-.
Ante una cita de esta trascendencia, lo lógico es que equipo, afición y directiva fueran todos a una. Sin embargo, el ambiente se ha enrarecido en las horas previas por culpa de una decisión incomprensible de la directiva blanquiverde: prohibir la entrada de varios abonados por sus comentarios en Twitter.
A través de un burofax, el Córdoba ha dado la noticia a unos abonados que se sienten estafados -han pagado su abono y no pueden acudir en lo que resta de temporada al estadio de su equipo por dar su opinión en público-. Una decisión dictatorial que esta directiva ya tomó en la temporada 14-15, cuando el primer equipo firmó una de las peores campañas de toda la historia en Primera División. Entonces, el club retiró varios carnets y la situación terminó en los tribunales, que dieron la razón a los abonados sancionados.
En una semana en la que te juegas la vida, que debería existir una unión total, la directiva del Córdoba se empeña en que exista crispación. Cosas del fútbol moderno...