El Atlético de Madrid está cansando de fallar penaltis y lo peor de todo es que no terminan de ponerse de acuerdo en el mal que les hace errar la mayoría de los que tira. Da igual el lanzador. El equipo rojiblanco ve la portería más pequeña cuando alguno de sus futbolistas coloca el balón en el punto fatídico.
En la pasada Champions, el título se decidió en la tanda de penaltis y el Atlético perdió ante el Real Madrid con un lanzamiento fallado por Juanfran. Pese a ello, había marcado al menos cuatro de los cinco. Antes, en semifinales, Torres había fallado un penalti en el Allianz Arena.
En la presente temporada, el Atlético de Simeone tampoco ha mejorado desde los once metros. De 13 lanzamiento sólo ha marcado cinco fallando un total de 8. Los dos últimos tuvieron lugar en el partido ante Osasuna donde Carrasco y Thomas fallaron dos penas máximas en un sólo minuto. Por suerte para el Atlético, el marcador ya era de 3-0 a su favor.
El resto de penaltis fallados esta temporada son los siguientes: Kevin Gameiro en la Copa ante el Barcelona; Antoine Griezmann frente al Bayern en Champions y dos en Liga ante el Valencia y el Leganés; Torres con el Celta y Gabi con el Valencia. Esa es la lista negra rojiblanca.
El jugador que más eficaz se ha mostrado en esta faceta maldita es Gameiro con goles en los partidos frente al Alavés en Liga y en Champions ante el Bayer Leverkusen. Torres vio portería con el Sporting, Griezmann con el Leicester y Saúl anotó ante el Guijuelo.
Tras el partido ante Osasuna, tres protagonistas hablaron de los penaltis. El primero fue Carrasco: "Puede ser que no entrenemos demasiado los penaltis. También hay un portero y mala suerte". Luego fue el turno de Simeone: "No puedo explicar nada, es difícil de explicar, un penalti es una ejecución individual. No (es mala suerte)". Por último tomó la palabra Thomas: "Ha sido un momento que quería tirar el penalti, quería hacer un gol, pero al final el portero me lo ha parado bien. Tengo que seguir trabajando".
El Atlético de Madrid sigue gafado a la hora de lanzar penas máximas y tendrá que mejorar en este aspecto ya que nunca se sabe si nuevamente un penalti puede volver a decidir un título.