En el FC Barcelona están que fuman en pipa con la lesión de Ousmane Dembélé. No es para menos. El delantero francés, el fichaje más caro en la historia del club —unos 150 millones de euros—, no reaparecerá hasta el año que viene tras lesionarse este sábado ante el Getafe (1-2), en su primer partido como titular en Liga con la camiseta azulgrana.
"Rotura del tendón del bíceps femoral de la pierna izquierda", rezaba el parte médico emitido este domingo por el Barça, que sospecha que el deficiente estado del césped del Coliseum Alfonso Pérez —según Marca, en el club azulgrana entienden que la hierba estaba seca y larga— contribuyó a la lesión de Dembélé, de 20 años.
Sobre el caso Dembélé hablaba el lunes el entrenador del Barça, Ernesto Valverde, en la previa del partido de Liga contra el Eibar en el Camp Nou (22:00 horas), asegurando que el galo se lesionó como consecuencia de un gesto "muy agresivo". "Es un jugador que no ha tenido nunca un problema muscular, que no tiene experiencia para reconocer esas molestias. Pero cuando un jugador que va a esa velocidad da un taconazo, entra dentro de las probabilidades de que te ocurra. Es un gesto muy agresivo", dice el Txingurri, negando así que la lesión se debiera a las condiciones del césped del Coliseum.
Desde el club aseguran que Dembélé, que apenas ha podido jugar 118 minutos con la camiseta azulgrana —71 en Champions frente a la Juventus y 47 en Liga (22 contra el Espanyol y 25 ante el Getafe)—, estará de tres meses y medio a cuatro meses de baja. "El jugador será sometido a tratamiento quirúrgico por el Dr. Sakari Orava esta próxima semana en Finlandia", añade el parte médico emitido por la entidad culé.
[ÚLTIMA HORA] Comunicado médico de Ousmane Dembélé #FCBlive https://t.co/i5qPlxOOyQ
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) September 17, 2017
Sin embargo, el doctor Pedro Luis Ripoll, del Centro de Excelencia FIFA Ripoll y De Prado Sport Clínic, cree que cuatro meses es poco tiempo. "Es un período un poco justo para la recuperación de Dembélé", opina el galeno.
En cualquier caso, Dembélé viajó a Finlandia para ser operado del tendón. El jugador, que ya ha sido intervenido con éxito, se trasladó en silla de ruedas —en una imagen captada por el periodista Ignacio Miguélez— y viajó acompañado por el jefe de los servicios médicos del Barcelona, el doctor Ricard Pruna. Allí, en tierras finesas, el jugador galo se puso en manos del doctor Sakari Orava, que estará ayudado en la intervención de su pupilo Lasse Lampainen y del propio Pruna.
Un "dios" de la medicina deportiva
Pero, ¿por qué Dembélé ha sido operado en Finlandia? El doctor Sakari Orava, de 72 años y con casi cuatro décadas en activo (desde 1980), es toda una eminencia en el campo de la medicina deportiva, además de un consumado especialista en lesiones musculares y de tendones. Por las manos del médico finlandés, a quien muchos deportistas definen como el doctor House del deporte, han pasado futbolistas como Pep Guardiola, David Beckham, Marco van Basten, Andrea Barzagli y Fabio Coentrao, además de atletas como Haile Gebreselassie, Frankie Fredericks, Merlene Ottey y la española Marta Domínguez.
Significativo es el caso de la palentina, que durante los Campeonatos de Europa de atletismo celebrados en Helsinki en junio de 2012, a menos de dos meses vista de los Juegos de Londres, sufrió una lesión en bíceps femoral izquierdo. Domínguez fue operada a tiempo por el doctor Orava y pudo competir en la capital británica, aunque la española acabaría muy lejos de las medallas, en duodécima posición. Pese a todo, Marta siempre se ha referido al galeno como a "un dios".
Orava, que es profesor honorario de la Universidad de Murcia desde el año 2000, vive en la ciudad de Naantali, a apenas 15 kilómetros al oeste de Turku —donde tiene una de sus tres clínicas—. Esta eminencia en medicina deportiva, que es políglota —además de finlandés, también habla inglés, alemán, español, italiano y sueco—, fue el médico de la selección de su país desde los Juegos Olímpicos de Seúl'88 hasta los de Sydney 2000. Y también fue deportista en su juventud, pues en 1962, con 17 años, se proclamó campeón nacional de boxeo en la categoría de 54 kilos. A nivel personal, Sakari Orava está casado, tiene dos hijos y en sus ratos libres le gusta pintar.
Toda una eminencia este "dios" finlandés, a quien Dembélé y el Barça se encomiendan para tratar de salvar la carrera deportiva del joven futbolista.