Antes de un Clásico, clásica derrota del Atlético de Madrid cuando no tiene el día y se topa de tú a tú con un equipo que intenta jugarle con el mismo sistema y la misma intensidad que han hecho del conjunto del Cholo un aspirante a todo durante más de cinco años. Fue una partida de ajedrez lo que se vio en Cornellá entre Espanyol y Atlético. Los locales propusieron un partido cerrado, Simeone lo aceptó y, al final, un simple detalle definió para Quique Sánchez Flores el triunfo de su equipo. Así de simple.
El 1-0 de Cornellá es un duro golpe para el Atlético de Madrid, que perdió su condición de invicto, su registro de 20 partidos ligueros consecutivos sumando al menos un punto y su opción de ver el Real Madrid-Barcelona con los deberes hechos antes de Navidad. Todo por un partido en el que del minuto 1 al 87, nadie quiso romper el guión, soso para el espectador y estresante para los entrenadores, que hay siempre en los duelos con más táctica que goles.
Simeone y Quique pusieron sus piezas sobre el tablero y cuando ambos llegaron al descanso se dieron cuenta de que o seguían así el resto del partido o uno de los dos tenía que ser valiente y hacer un cambio que nadie esperase. No fue suficiente meter a Correa en el cuadro rojiblanco o a Piatti en el bando blanquiazul porque esas variantes, casi idénticas, sólo sirvieron para volver a igualar las fuerzas. Ese intercambio leve de golpes fue el spoiler claro de que valentía, poca en Barcelona.
De oportunidades, mejor ni hablar o poco hay que decir. Baptistao tuvo una en la primera parte con un mano a mano que erró clamorosamente cuando todo el estadio cantaba gol. En los visitantes y ya con Torres en el banquillo, la más clara la tendría Gameiro en la segunda parte y su definición tampoco tuvo nada que envidiar en el terreno negativo a la de su homónimo en el Espanyol. Hubo poco ataque y dentro de esa escasez... mejor no seguir.
Sergio García puso el jaque mate
En un partido meramente táctico tienes que tener dos cosas para ganar: un jugador decisivo que se atreva a coger el balón, romper líneas a base de calidad y jugarse disparos cuando la pelota quema en los pies y un centro del campo que haga de cada pase un seguro de vida para su equipo. Ahí se le fue el partido al Atlético de Madrid. Más por lo segundo que por lo primero porque Griezmann intentó como pudo arrastrar a su equipo a base de latigazos por velocidad, pero nadie le acompañó y además el francés se ha empeñado en acumular partidos sin tirar a portería. Asiste, busca y reparte juego, pero no tira y sin goles del '7', el Atlético no sabe a quién agarrarse. Ni siquiera le salió bien tirarse en el área para que picase el árbitro.
Dentro de esa falta ya endémica este año de un hombre que gane partidos, Cornellá también vio la peor versión de Koke y Saúl. Thomas y Gabi tampoco estuvieron a un nivel estratosférico, de hecho cumplieron y poco más, pero de los dos primeros se espera algo más siempre. Ya sea en forma de último pase o de llegada desde segunda línea. Ninguno fue preciso y cada balón que se les escapaba del pie se convertía en una piedra más por el camino. El Espanyol aprovechó cada error para salir a la contra con Gerard Moreno y Sergio García en modo peleón.
Alrededor del minuto 80 de partido, Quique y Simeone empezaron a tener dudas. ¿Meto algo más en ataque y me la juego o me quedo así y espero a que caiga el gol del cielo? En el caso del Cholo, Carrasco era su opción valiente y Augusto la segura. Una amarilla para Gabi tomó la decisión por el argentino y a partir de ahí pocos pensaron en una victoria visitante. También es cierto que en el bando local, Quique se jugó los mismos órdagos que Simeone; es decir, ninguno. Aún así, al exrojiblanco sí le salió bien la jugada con una contra del Espanyol que Sergio García concretó para el definitivo 0-1 en el minuto 87.
La cara de Simeone fue la misma que la que suele poner un ajedrecista que con tablas en la mano ve una falla en su estrategia y tiene la sensación de que el rival, de casualidad, ha sacado el mayor provecho de ella sin ni siquiera buscar esa rendija por la que entrar y machacar al oponente. Así es el fútbol y los detalles, esta vez, dejaron al Cholo con el regusto amargo de ver el Clásico sin saber muy bien que es lo mejor para su equipo.
Ficha técnica
RCD Espanyol, 1: Pau López; Javi López, Óscar Duarte, Mario Hermoso, Aarón; Darder (Granero, m.86), David López, Fuego; Baptistao (Piatti, m.71), Sergio García y Gerard Moreno
Atlético Madrid, 0: Oblak; Vsalkjo, Savic, Godín, Filipe; Thomas (Correa, m.63), Gabi (Augusto, m.85), Saúl, Koke; Torres (Gameiro, m.70) y Griezmann
Goles: 1-0, m.87: Sergio García
Árbitro: Melero López (Comité andaluz). Amonestó a Saúl (m.50), Koke (m.73), Javi López (m.82), Gabi (m.83), Pau López (m.93) y Augusto (m.93)
Incidencias: Partido de la decimoséptima jornada de LaLiga Santanter disputado en el RCDE Stadium de Cornellá-El Prat ante 19.327 espectadores