Como era de esperar, poco ha tardado Anna Tarrés en rentabilizar su participación en el programa de famosos saltando desde un trampolín Splash!. Ni una semana lleva en liza, y ya ha concedido entrevistas. Y no sin titulares, por supuesto.
Uno de los más destacados, sin duda, el que abre la pieza en La Razón: "Yo también he trabajado con Divos", a lo que añade "con personajes que, cuando llegan a cierto nivel, tratan de imponer sus normas". Parece curioso que esas palabras provengan de una entrenadora que se ha ganado la fama de dictadora, y más siendo pocos días después de que Gemma Mengual, una de las deportistas más grandes que ha visto España, la culpara de su retirada.
Eso sí, Anna Tarrés asegura que a través del programa, con famosos con kilos de más, personajes populares de grandes atributos y algún que otro deportista para mantener el espectáculo, sigue "luchando por dar visibilidad al deporte femenino y a la natación sincronizada, y me ha salido muy bien".
Sobre su etapa como entrenadora, la Tarrés afirma que "nunca he sido partidaria de entrenar a través del miedo". Seguro que muchas de sus expupilas no estarán del todo de acuerdo. Aunque, asegura, "lo que importa es el resultado".
Preguntada por su dureza a la hora de valorar a saltadores como Falete o Toñi Salazar, la catalana responde que eso es algo que forma parte de este tipo de competiciones. "Recuerdo lo que llorábamos mis chicas y yo cuando nos puntuaban por debajo de nuestros méritos". Seguro que ellas seguirían llorando mucho más, eso sí.
Acerca de sus resultados como seleccionadora española, Anna Tarrés se desvive recordando todas sus medallas conquistadas –que no son pocas- para afirmar que "yo también he sido idealizada. Participas en unos Juegos Olímpicos, ganas medallas, te saluda Doña Sofía...te terminas acostumbrando a esta forma de vivir" para terminar con otra muestra de su modestia, señalando que "a ver quién es el guapo que tiene mi currículum".
Destaca que "lo hicimos las chicas y yo, trabajando". Ahora, para alivio de muchas, ya están por separado. Tanto, que el lunes, mientras se estrenaba el programa en el que Anna Tarrés hacía de juez –con muchas críticas, por cierto- de juez, a la misma hora en Murcia, en la Gala del Deporte Nacional, las chicas de la sincro recogían un premio por la medalla conquistada en Londres. No deja de ser curioso. O no tanto.