Uno de los Giros más raros de los últimos años. Ésa es la primera definición que podríamos sacar de la ronda italiana. Por varias razones: arranca un viernes, algo totalmente novedoso, y el motivo es porque lo hace desde Belfast, en Irlanda del Norte, lo cuál, además, provocará que tras tres días en la isla, viajen a Italia, teniendo ya una jornada de descanso el primer lunes. De esta forma, serán tres días de asueto en total los que tendrán los ciclistas, por los habituales dos que se suelen ver.
Pero hay más. No están en liza ninguno de los ganadores de una grande del año pasado: Nibali, Froome o Horner, pero sí el de hace dos años, Hesjedal, o los dos ocupantes del podio de Francia, Joaquim Purito Rodríguez y Nairo Quintana. Que a la vez, son los máximos favoritos, junto a los que completaron el podio de la pasada edición, Rigoberto Urán (que ha cambiado el Sky británico por el Omega Pharma belga) y Cadel Evans, que llega acompañado del asturiano Samuel Sánchez, y que bien podría suplir algún problema de éste y coger el timón del equipo.
Cada uno de ellos ha hecho una aproximación distinta a este Giro de Italia. Mientras el australiano viene de vencer en el Giro del Trentino, última carrera previa, los demás han optado más por los entrenamientos, sobre todo Purito y Quintana, con largas concentraciones en el Teide y Colombia, respectivamente, y habiendo competido bastante poco.
Y es que esa ausencia de competición puede ser un arma de doble filo, teniendo en cuenta que la edición de este año concentra su dureza en la parte final del recorrido. Siempre se dice que una gran vuelta no se gana en el primeros días, pero sí se puede perder. De hecho, arrancando en Belfast, donde el museo al Titanic, puede ser que más de uno ya naufrague en los tres primeros días de carrera; pero también es cierto que el estar en lo más alto del podio se decide los últimos días.
El recorrido
De hecho, el Giro 2014 se divide en: ocho etapas llanas, donde incluso hay opciones españolas en las volattas, con Fran Ventoso (Movistar) o Koldo Fernández de Larrea (Garmin), pero con un gran dominador sobre el tapete, el alemán Marcel Kittel; cinco de media montaña; tres contrarreloj: por equipos en el día inicial, de 21km; una individual en la segunda semana, de casi 42, y que ha sido suavizada para favorecer a los escaladores; y una cronoescalada al Monte Grappa de 27km el antepenúltimo día; y cinco de alta montaña.
Todo ello amenizado con hasta 9 finales en alto, de los cuáles 5 (más la cronoescalada) se concentran en las últimas ocho etapas, momento al que habrá que llegar con las fuerzas intactas, y puede que por ello, Joaquim Rodríguez y Nairo Quintana hayan optado por competir menos. Destacando, sin duda, la etapa 16, con final en Val Martello, previo paso por el Gavia y el Stelvio, que será el techo de esta edición con sus 2758 metros de altura.
Más candidatos
Pero esos cuatros nombres iniciales no son los únicos. En el mapa de favoritos aparecen otros como la guardia italiana, comandada por los veteranos Scarponi y Basso (aunque el estado de forma de este último ofrece algunas dudas). Junto a ellos, Pozzovivo, el menudo escalador que ya fue 10º el año pasado y 6º en la Vuelta, demostrando mejora en las cronos. No son favoritos claros a ganar el Giro, pero sí al podio y puede que a alguna sorpresa.
Además, hay que tener en cuenta a la dupla del Garmin, formada por Daniel Martin (irlandés) y Ryder Hesjedal (canadiense) que ya ganó la edición de 2012, robándosela a Joaquim en la última crono, y por tan sólo 16 segundos. Otros aspirantes son los polacos Niemiec (sin Scarponi, hará dupla con Cunego) y Majka (el joven valor compañero de un Contador que se ha centrado en el Tour de Francia). Junto a Majka, su compañero Nicolas Roche (irlandés y primo de Daniel Martin, 5º en la última Vuelta a España); y el francés Pierre Rolland, que tras destacar en el Tour de hace dos años, parece haber vuelto a recuperar su golpe de pedal. Fuera de este abanico de favoritos, hay algunos nombres de hacer top ten, pero parece complicado que se acerquen al podio.
Los españoles
En cuanto a la participación española, tras desaparecer Euskaltel, el pelotón World Tour sólo cuenta con un equipo de nuestro país, el Movistar Team, que acude con opciones de todo: el gran favorito es su joven valor, el colombiano Quintana, que contará con Igor Antón para la montaña, y con otros hombres como Gorka Izaguirre, José Herrada o Jonathan Castroviejo de escuderos, además de Fran Ventoso para los sprints. Faceta, esta última, donde Kolde Fernández lanzará al estadounidense Farrar, pero puede jugar su baza algún día.
El otro gran favorito también es español, Joaquim Rodríguez. Y junto a él, su guardia pretoriana formada por Dani Moreno (que puede tomar las riendas del equipo), Alberto Losada y Ángel Vicioso. Acompañando a Scarponi encontramos a Mikel Landa, que será su último peón en montaña, con serias opciones de conquistar alguna cima; y junto a Evans, Samu. Quizás, la participación española más floja que se recuerde en la ronda transalpina, con sólo 12 corredores españoles, pero con opciones a todo, tanto en victorias parciales, como en la general.
Arranca el Giro de Italia en Irlanda, la carrera más bonita, pues siempre discurre por parajes insuperables. Mucha montaña, crono endulzada y sin un claro favorito que destaque. Buscaba la organización un "Giro más humano" para coronar a "un campeón más creíble". Desde el 9 de mayo, arrancando con la lluvia irlandesa, para terminar, y sin que haya contratiempos con las temperaturas durante el recorrido, el 1 de junio en Trieste, una vez superados 3450km. Es la magia del Giro, es la magia del ciclismo. Una edición que homenajeará a Marco Pantani en el décimo aniversario de su fallecimiento.