Rolls-Royce ha buscado inspiración de la época dorada de los príncipes indios para crear un exclusivo modelo denominado Maharaja Phantom Drophead Coupé, que la marca sólo construirá para los poderosos clientes del mercado de Dubai. La inspiración en esa época se justifica debido a que durante más de cinco décadas los maharajás indios compraron más de 840 automóviles de la marca empujando al fabricante británico a liderar el mercado del lujo.
El Maharaja Phantom Drophead es un coupé de cuatro plazas que mide 5,61 metros de largo y está propulsado por un motor V12 de 6,7 litros y 450 CV, con el que alcanza una velocidad máxima de 240 km/h. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos, con un gasto de combustible de 14,8 l/100 km, consumo que preocuparía a cualquier conductor, pero que no lo hará a los poderosos clientes que puedan desembolsar por este coche unos 534.000 euros más o menos.
El modelo se construye artesanalmente y cuenta con numerosos detalles que le aportan exclusividad, como la pintura Blanco carrara de la carrocería, elementos del interior en color verde esmeralda o el emblema del pavo real, pájaro nacional de la India, integrado en la marquetería. Los asientos son de cuero en color crema y en los mismos destacan los bordados simulando las plumas del pavo.
Como curiosidad, el Phantom no sólo sirve para viajar como un príncipe en este mundo sino que también ha servido a una empresa británica de servicios funerarios, AW Lymn, que lo adaptado como como coche fúnebre.
Más información del Rolls-Royce Maharaja Phantom Drophead Coupé.