En 2015 Renault lanzaba al mercado la quinta generación del Espace, un modelo que sin perder su versatilidad y capacidad interior de monovolumen, se adentraba en el terreno de los crossover gracias a un diseño más atractivo con toques deportivos. Y ahora, la firma francesa refuerza esa sensación con argumentos mecánicos. El Espace se somete a una ligera actualización, que no afecta al estilo, pero que suma argumentos en el apartado de motores.
Así, en la gama de gasolina, donde el Espace hasta ahora solo ofrecía una versión con el motor TCe 200 –el mismo que equipa el Renault Clio R.S.– llega una variante más potente y dinámica. Se trata del motor TCe 225, desarrollado por Renault Sport para el deportivo Alpine A110. Con este motor, que cuenta con turbo Twin Scroll o distribución variable y el cambio automático EDC de 7 velocidades, las prestaciones del Espace suben de manera considerable. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7,6 segundos, alcanza los 224 km/h y consume de media 6,8 l/100 km. Es el gran cambio, pues en el terreno diésel se mantienen las dos alternativas existentes hasta ahora, el 1.6 dCi con 130 y 160 caballos.
Otra novedad en el Espace 2017 es una nueva versión, denominada Executive, que convierte el interior del Espace en una berlina de representación. Una transformación realizada por Renault Tech y que ofrece una fila central con dos asientos calcados a los delanteros, que presentan regulación eléctrica, calefacción y ventilación. Están separados por una nueva consola central con un hueco para dejar pequeños objetos y frente a ellos se colocan dos pantallas TFT. Para viajar como en una limusina.
Más información del Renault Espace TCe 225.