Han sido más de 30.000 clientes europeos los que han elegido un Ford Mustang desde que la marca decidiera lanzar en el mercado del viejo continente el legendario deportivo americano. Pero la firma del óvalo no quiere vivir de las rentas y ha decidido darle un retoque al Mustang para que sea aún más apreciado por los conductores de aquí. En el pasado Salón de Fráncfort presentó la actualización del modelo, que desde el punto de vista estético ve retocada su imagen con un capó más bajo y un frontal más agresivo.
Pero los principales cambios llegan en aspectos técnicos. Por ejemplo, se han revisado los dos motores disponibles. El 5.0 V8 ahora llegará a los 450 caballos de potencia, mientras que el 2.3 EcoBoost mantendrá la cifra de 290 caballos. Ambos se van a ofrecer con un cambio automático de 10 velocidades. Y en cuanto a sus prestaciones, aún sin datos oficiales, se espera que el Mustang V8 alcance los 100 km/h en menos de 4 segundos.
El comportamiento también se ha estudiado al milímetro en el exigente mercado europeo. Para ello se le ha incorporado al Mustang un nuevo sistema de amortiguación MagneRide, que reacciona rápidamente para adaptarse a los cambios en las condiciones de la carretera. Y ofrece dos nuevos modos de conducción: DragStrip, con el que logrará la máxima aceleración, y My Mode, con el que podrá configurar el comportamiento a gusto del conductor. Esos modos se suman al Normal, Deportivo, Circuito y Nieve. Todo para que los europeos disfruten del auténtico espíritu Mustang.
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