L D (EFE) Tiger y Olazábal jugaron juntos tres rondas y en todas el resultado del norteamericano superó al del español. "Si me hubiesen dicho la semana pasada que iba a terminar tercero en este Abierto, no me lo hubiese creído. Le habría invitado a ese tipo a lo que hubiese querido", confesó Olazábal, que calificó la semana en St. Andrews como "muy positiva" a pesar de que no logró dar caza a Tiger en la última jornada.
Tiger, que le devolvió el piropo a Olazábal tras cruzar el mítico puente final de St.Andrews, le comentó ya en el 'green': "Mete ese 'birdie', no falles". Y el vasco embocó para empatar en la tercera plaza, llevarse un premio en metálico de 364.000 euros y experimentar un notable ascenso en la clasificación mundial. "Mi vuelta final no ha sido buena, pero no me voy con mala sensación. En general la semana ha sido positiva. Hubiera sido difícil de todas maneras ganarle a Tiger porque el campo estaba complicado y las banderas en sitios difíciles. La prueba es que, en general, los resultados tampoco han sido nada espectaculares", opinó Olazábal.
El jugador de Fuenterrabía, de 39 años, admitió que jugó "tranquilo". "No ha habido ningún momento especial de tensión. El (Tiger) ha jugado muy sólido y este campo le va bien, no cabe duda. Tiene la gran posibilidad de que llega de dos golpes en los dos pares 5 y de uno en cuatro de los pares 4", añadió. Para Olazábal, la diferencia de Tiger con el resto no es tanto física o mental, "sino más bien su juego corto". "Otros jugadores también poseen un excelente potencial físico y mental como Tiger, pero no su juego corto. Es un golfista completísimo. Va camino del récord de Nicklaus (18 'Grandes'), pero en golf nunca se sabe. Sólo el tiempo lo dirá", apuntó.
Sergio García, empatado en el quinta plaza a 7 golpes de Tiger, aseguró que se marcha de St.Andrews "triste por no haber acabado mejor". "Una ráfaga de viento me desconcentró en el hoyo 12 y a partir de ahí perdí totalmente la concentración. No obstante, en general debo estar contento con el planteamiento que he hecho del torneo", indicó. Sobre los diez títulos de Grand Slam que suma Tiger, el jugador castellonense recalcó: "Que leve diez títulos a mi carrera no le afecta. Lo que tengo que hacer es preocuparme de mí mismo y de mi carrera como golfista".
Tiger, que le devolvió el piropo a Olazábal tras cruzar el mítico puente final de St.Andrews, le comentó ya en el 'green': "Mete ese 'birdie', no falles". Y el vasco embocó para empatar en la tercera plaza, llevarse un premio en metálico de 364.000 euros y experimentar un notable ascenso en la clasificación mundial. "Mi vuelta final no ha sido buena, pero no me voy con mala sensación. En general la semana ha sido positiva. Hubiera sido difícil de todas maneras ganarle a Tiger porque el campo estaba complicado y las banderas en sitios difíciles. La prueba es que, en general, los resultados tampoco han sido nada espectaculares", opinó Olazábal.
El jugador de Fuenterrabía, de 39 años, admitió que jugó "tranquilo". "No ha habido ningún momento especial de tensión. El (Tiger) ha jugado muy sólido y este campo le va bien, no cabe duda. Tiene la gran posibilidad de que llega de dos golpes en los dos pares 5 y de uno en cuatro de los pares 4", añadió. Para Olazábal, la diferencia de Tiger con el resto no es tanto física o mental, "sino más bien su juego corto". "Otros jugadores también poseen un excelente potencial físico y mental como Tiger, pero no su juego corto. Es un golfista completísimo. Va camino del récord de Nicklaus (18 'Grandes'), pero en golf nunca se sabe. Sólo el tiempo lo dirá", apuntó.
Sergio García, empatado en el quinta plaza a 7 golpes de Tiger, aseguró que se marcha de St.Andrews "triste por no haber acabado mejor". "Una ráfaga de viento me desconcentró en el hoyo 12 y a partir de ahí perdí totalmente la concentración. No obstante, en general debo estar contento con el planteamiento que he hecho del torneo", indicó. Sobre los diez títulos de Grand Slam que suma Tiger, el jugador castellonense recalcó: "Que leve diez títulos a mi carrera no le afecta. Lo que tengo que hacer es preocuparme de mí mismo y de mi carrera como golfista".