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Ron Dennis muestra su verdadera cara: "Peleábamos contra Alonso"

Ron Dennis ha dejado patente que tiene dos caras. Este domingo, tras la disputa del Gran Premio de China, el director de McLaren-Mercedes dijo ante la prensa internacional que dará las mismas oportunidades a Fernando Alonso y Lewis Hamilton, que el próximo 21 de octubre se jugarán el Mundial de Fórmula Uno junto a Kimi Raikkonen (Ferrari). Pero después se le escapaba una frase ante los medios de comunicación británicos: "Peleábamos contra Alonso y nos valía que Kimi ganara y Lewis fuera segundo".

(Libertad Digital) A Dennis le traicionó el subconsciente ante los medios de su país para reafirmar lo que Fernando Alonso lleva denunciando desde hace varias semanas: que en McLaren hay un trato de favoritismo absoluto hacia Hamilton. Sólo espetó una frase, pero lo dice todo: "Peleábamos contra Alonso y nos valía que Kimi ganara y Lewis fuera segundo". La frase la recoge el diario Marca en su edición de este lunes.
 
Lo hacía poco después de afirmar ante los medios de comunicación internacionales que tiene la intención de dar las mismas oportunidades a Alonso y Hamilton en la última prueba del Mundial. "Tengo la intención de dar las mismas oportunidades a ambos de ganar el Mundial, como he venido dando hasta ahora. ¿Han visto ustedes lo contrario en algún momento de la temporada?, ¿no, verdad? Y si un piloto tiene un problema o los dos pilotos, es un problema del equipo y no estamos cómodos si un piloto no está cómodo con el equipo", señalaba Ron Dennis
 
La credibilidad del patrón de la escudería de las 'flechas de plata' queda puesta en entredicho. Ya lo había avisado el bicampeón mundial el sábado tras la sesión de clasificación. "Nunca puedes confiar demasiado en lo que vaya a hacer esta persona", dijo en clara referencia a Dennis, a quien dedicó una perla del refranero español: "Dime de qué presumes y te diré de qué careces".
 
Fernando Alonso ya no puede más, pero acepta que, si las cosas no cambian, el año que viene tendrá que aguantar en McLaren. Se siente muy decepcionado con su equipo: "Me esperaba mucho más, todos lo esperábamos", afirmó. "El trato no ha sido del todo bueno. Desde fuera el equipo tenía otra imagen, serio, pero muy profesional". No calificó el ambiente de hostil, pero sí dijo que "algunos han dejado de hablar, algunos han tomado su dirección, y se dedican luego a hablar en los periódicos de lo que les interesa". "El equipo sabemos lo que puede llegar a alegrarse con las victorias de uno y otro. O las declaraciones mismas de tu jefe, que siente y cariño paternal hacia uno de tus compañeros y rivales, por tanto nunca puedes confiar demasiado en lo que vaya a hacer esta persona".
 

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