"Si no ganamos, no se puede decir que sea una gran temporada", dice Messi

L D (EFE) El jugador confesó sentir "cólera, decepción y tristeza" porque siente que tenían "los medios para cumplir una temporada magnífica". "Comenzamos bien antes de empezar a perder puntos. Luego fuimos eliminados demasiado pronto de la Liga de Campeones. Después salimos de la Copa del Rey cuando pensábamos que habíamos hecho lo más difícil. Si sumas todo, hace daño", indicó. Messi explicó todo esto por los puntos cedidos en los últimos minutos, sobre todo frente al Betis y al Espanyol.

Pese a todo, el argentino no da la liga por perdida y aseguró que "el Mallorca a menudo crea problemas a los madrileños", por lo que no descartó que logren un resultado que sirva a sus intereses. El balance del argentino es mejor a nivel personal: "Tengo motivos para estar feliz, creo que he hecho una buena temporada". Entre sus mejores recuerdos destacó el gol logrado contra el Getafe en la ida de la Copa del Rey y el triplete frente al Real Madrid, con un gol logrado en el último minuto.

"Aunque no ganamos, fue algo muy fuerte en un partido de este nivel. Tiene un sabor particular, marcar un gol así nunca lo hubiera imaginado", indicó. Messi negó que intente parecerse a su compatriota Diego Maradona, pese a las similitudes entre ambos, amplificadas tras haber logrado tantos similares a los del "Pelusa". Tras marcar el gol con la mano el pasado sábado, Messi indicó que no se dio cuenta de las similitudes con el tanto logrado por Maradona a Inglaterra en el Mundial de México'86. "No pensé en eso en absoluto, lo celebré como un gol más. Fue Deco el que me lo dijo en el vestuario. También fue él el que me habló de que mi gol de Getafe se parecía al de Maradona", aseguró el jugador, que consideró "casualidad" estas similitudes.

Messi no piensa abandonar el Barcelona por el momento, aunque le gustaría terminar su carrera deportiva en un club de Argentina. "No pienso (abandonar el Barcelona) en absoluto, ni siquiera en un futuro lejano. Sé que todo puede pasar, pero me gusta esta ciudad, este club, sus aficionados. No olvidaré como me acogieron cuando era pequeño ni todo lo que han hecho", comentó. Señaló que en la Ciudad Condal tiene "una vida tranquila" y que no tiene la impresión "de ser tratado como una estrella", algo que no le sucede en Argentina.

"Los argentinos muestran a veces una pasión excesiva, hay una especie de fanatismo. A veces es inquietante y luego se pasa. Incluso allí trato de seguir siendo yo mismo, de disfrutar de la vida como aquí. Además, es mejor sentirse amado que lo contrario", aseguró. Messi defendió a su compañero Ronaldinho, al que consideró "el mejor" y consideró "injusto" que las críticas se centren en él cuando las cosas no van bien.

Justificó que el brasileño no dispute la Copa América para poder descansar, pero señaló que su caso es diferente porque ha estado lesionado tres meses y se encuentra "en plena forma". "Será la primera vez que dispute la Copa América y me gustaría que Argentina ganara un trofeo, que ya va siendo hora", afirmó.