Torres refuerza las opciones europeas del Atlético y baja de la nube al Getafe (1-4)

L D (EFE) Fernando Torres, baja ante el Espanyol y duda durante toda la semana, demostró en apenas dos minutos que su presencia es imprescindible en el Atlético de Madrid. En ese tiempo, recibió un balón largo del portugués Maniche, superó en velocidad a sus rivales y batió con un disparo cruzado al argentino Pato Abbondanzieri. El equipo rojiblanco observó desde entonces con más claridad su futuro europeo, sobre todo porque este encuentro era vital para mantenerse en la sexta posición y porque el Getafe no creaba demasiadas dificultades al renovado sistema visitante, con un 4-1-4-1 sobre el terreno de juego y sólo con Torres en punta. Otro cabezazo del capitán, que se marchó alto, y uno más del brasileño Fabiano Eller, que despejó Abbondanzieri a saque de esquina, aportaron argumentos al Atlético para sentirse cómodo sobre el campo, aún más cuando otro contragolpe, beneficiado por una serie de rechaces y con pase último de Petrov, sirvió a Maniche el 0-2.

 

Sólo se habían disputado 18 minutos, tiempo suficiente para una efectividad máxima de los rojiblancos y para ningún disparo del Getafe, que caía en fuera de juego ante la defensa adelantada de los visitantes. Pero el equipo azulón reaccionó tras el 0-2. Incluso dispuso de alguna opción para recortar distancias ante un Atlético replegado y dispuesto a administrar su renta en el marcador, pero Dani Güiza, autor de dos goles en la histórica remontada ante el Barça en Copa, se encontró con Zé Castro para despejar su disparo raso con Pichu ya batido. Los rojiblancos no querían el balón. O eso demostraron con sus incesantes imprecisiones en defensa y el centro del campo. Sus continuos balonazos dejaron la pelota en poder del Getafe, aunque el Atlético aún se guardó su contragolpe, como uno entre Antonio López y Petrov y que Galletti envió por encima de la portería.

La segunda parte afianzó el dominio del Getafe y el conformismo del Atlético, que, con el 0-2 en el marcador, optó por replegar aún más sus líneas en la reanudación. Y ahí sufrió el equipo rojiblanco, atrincherado en su área con el paso de los minutos y que recibió un merecido castigo en el primer cuarto de hora: el 1-2. El gol, que llegó poco después de un tanto anulado a Dani Güiza, fue un cúmulo de errores de la zaga del Atlético. De un saque de esquina, mal despejado por Jurado en el primer palo, surgió una jugada absurda, impensable para una defensa de la máxima categoría nacional, porque el balón botó en el área pequeña y el ex atlético Manu del Moral, solo, aprovechó el inesperado regalo (1-2, m. 60).

El conjunto visitante, habituado a complicarse este tipo de partidos, aprovechó su siguiente oportunidad para recuperar la tranquilidad, en otro pase del portugués Maniche y con otro gol de Fernando Torres, que dejó sentado a Abbondanzieri para firmar el 1-3. Ya suma doce goles durante la presente temporada de Liga. Ese tanto ya fue definitivo para el choque, porque el Atlético ya no dejó el resultado a expensas de las ambiciones ofensivas del Getafe y porque su rival perdió el camino del gol en los restantes minutos, un trámite hacia el triunfo del equipo rojiblanco, con inexistente penalti incluido y transformado por Galletti para llevar el 1-4 definitivo al marcador.