Eso no vale, habéis cambiado el titular.
A eso se le llama deportividad, si señor, con un par.
¿Un martillo en la mochila?. No sé, en mi época lo que llevabas en la mochila cuando jugabas un "partidiño", era la toalla, la pastilla de jabón, un par de calcetines, unos calzoncillos, las botas... ¡ah, que se me olvidaba!. El bocata de Nocilla.
La verdad es que no conocía hasta ahora qué necesidad deportiva requiere el uso de un martillo. Si esto fuera EE.UU. ese sociopata de 15 años, malcriado por sus padres, hubiera cogido el revólver del padre y le habría descerrajado todas las balas del tambor al contrincante.
La diferencia es que allí o le fríen, o no sale de la cárcel en la vida. Aquí le absolverán, o le llevarán a un centro de vacaciones y Playstation, le enseñarán a fumar porros y le "grabarán" en su mente la cantidad de derechos e impunidad que tiene hasta cumplir 18 años.
Si los martillazos los ha recibido en la cabeza de un rival, ¿por qué lo ingresan en un hospital?
Así es como me gustaría a mí recibir un martillazo: en la cabeza de un rival.
A veces la sintaxis, por una cuestión de ambigüedad, nos juega malas pasadas.
Me recuerda al primer partido de "fútbol" que jugaba el equipo Shaolin en la película "Shaolin Soccer" (*), solo que aquellos arreaban con llaves inglesas de medio metro.
Un saludo.
(*) Para quien no la conozca, Shaolin Soccer es una película autoparódica hecha en Hong Kong. En ella, se parodian a un tiempo las películas de artes marciales y los fantasiosos partidos de fútbol de la serie de anime "Campeones" (en España, también conocida como "Oliver y Benji"), trasladando las fantasmadas de los futbolistas a la imagen real. Al final, le pasa lo que a las películas de "Aterriza como puedas" y demás sagas de Zucker, Abrahams y Zucker: como película es bastante mala, pero es un humor tan tonto que uno acaba riéndose hasta con ganas.
_http://es.wikipedia.org/wiki/Futbol_Kung_Fu