Un mandato de escándalo

(Libertad Digital) Las denuncias, encabezadas por La COPE, Marca y El Mundo, se intensificaron en 2008. Ramón Calderón ya salió escaldado de la Asamblea Extraordinaria celebrada en mayo, en la que presentó una propuesta de nuevos estatutos para el club. Los socios compromisarios votaron mayoritariamente en contra (682 votos, por los 150 a favor y 34 abstenciones) de la polémica propuesta del presidente blanco que, entre otras cosas, contemplaba la modificación del voto por correo y la forma de elección de socios compromisarios, sin el requisito de tres avales. Calderón tuvo que escuchar cómo casi todo el auditorio entero pedía su dimisión y cuestionaba la “legalidad, ética y democracia” de la reforma.

 

En septiembre, la Cadena COPE, a través de José Antonio Abellán, volvió a poner de manifiesto las irregularidades que se estaban cometiendo en el club. Entonces el director de El Tirachinas desveló cómo los amigos de Calderón hacían negocios a costa del Real Madrid sin que éste obtuviera beneficios. Los implicados revendían entradas Vip de la UEFA a precios astronómicos que iban a parar a una empresa de eventos perteneciente al entorno del presidente. Sólo un mes después, Abellán seguía intentado desenmascarar al presidente blanco y aportaba documentos que demostraban cómo Calderón utilizaba regularmente la tarjeta de crédito del club para pagar algunos gastos de su vida personal: desde un café hasta un servicio en una clínica veterinaria, pasando por pagos en diversos restaurantes habrían corrido a cargo de los gastos del Real Madrid.

 

Para defenderse, el ya ex presidente convocó una rueda de prensa en la que aseguró que todo lo que se decía en las informaciones era "falso e inventado por unos mafiosos, delincuentes y mentirosos" (en referencia a la divulgación de la noticia por parte de la COPE).

 

Calderón se fue quedando cada vez más solo. A la polémica salida del club de uno de sus grandes defensores y miembro de la Junta directiva, Melchor Miralles, hubo que añadir otra marcha. A primeros de diciembre, alguien tan ligado al club como José Miguel González Martín del Campo 'Míchel' presentó su dimisión como director de las categorías inferiores del Real Madrid por diferencias con el presidente. "Como él no cree en mi trabajo, lo mejor es que me marche", dijo el ex futbolista.

 

Las cosas se siguieron complicando días antes de la polémica y ya decisiva Asamblea ordinaria del 7 de diciembre. La misma semana de la cita para aprobar las cuestas y presupuestos blancos, 'El Tirachinas' de la COPE aportaba nuevas pruebas, con documentos, audios y vídeos, sobre las supuestas irregularidades en la venta de entradas del Real Madrid. En concreto, José Antonio Abellán denunció que el club se embolsaba el 90 por ciento del precio de las localidades a "coste cero".

 

Por si esto fuera poco, coincidiendo con la Asamblea, el diario El Mundo se hacía eco de la investigación llevada a cabo por la Brigada Provincial de la Policía Judicial en torno a la trama del voto por correo. Dicha investigación judicial estaba en su fase final y todo apuntaba a que Ramón Calderón no se habría proclamado presidente del Real Madrid si se hubiera contabilizado el voto por correo, cuya anulación se produjo a raíz de una denuncia de él mismo. El juez había centrado sus sospechas de manipulación de voto en peñas cercanas al propio Calderón. El nuevo recuento dejaba a Calderón en tercer lugar por detrás de Villar Mir y Juan Palacios.