Comentario muy sensato de Webber, que sigue demostrando que tiene una de las cabezas mejor amuebladas de la F1, y que no tiene miedo de hablar y enfrentarse a quien sea cuando tiene razón.
Bien por el australiano...
Es que es de sentido común.
Además celebrar el evento provocará una escalada en el conflicto para aprovechar el eco extra que daría la F1.
Ya tardan en anularlo.
Buena opinión que debe resultar difícil de hacer pública por la presión que hay en los sectores de la competición en favor de la imagen, que acaba convirtiéndose en sectarismo para que unos cuantos se hinchen los bolsillos.
Bien por Webber.