(Libertad Digital) Con motivo de la publicación de su libro "España puede salir de la crisis", de Planeta, el presidente de FAES ha concedido una entrevista a XL Semanal, suplemento de ABC, en la que habla de la situación económica en España, de sus propuestas, y también de otras crisis que sufre nuestro país.
José María Aznar sostiene que "se equivocan todas las políticas que se basan en el incremento del déficit y de la deuda", que es precisamente la receta que piensa continuar siguiendo José Luis Rodríguez Zapatero, y advierte que si los gobiernos apuestan por "más proteccionismo, se llevará al mundo a una gran depresión como la de los años 30".
En su opinión, el aumento del gasto público "es una mala receta", porque añade al paro y la bajada de la demanda "la carga financiera de un endeudamiento excesivo, será más complicado salir".
"Conmigo en el Gobierno no se hubiera producido esta crisis que se ha producido", añade Aznar al recordar que él puede "aportar ahora un valor importante,: el de la experiencia". "Yo creo saber lo que España necesita para salir de la crisis", continúa el ex presidente del Gobierno apuntando que llegó al poder en un país "con condiciones económicas muy malas "y pude dejar el país más rico de la historia de España". "Esta herencia", lamenta, "se ha dilapidado en cinco años".
El presidente de FAES, tras conocerse las terribles cifras del paro, cuenta que tiene varios familiares sin trabajo. "La institución familiar salvó la situación y ahora volverá a hacerlo", opina Aznar, para quien "la red de solidaridad más importante que existe es la familia". Por ello, "dedicarse a destruir la familia y sus valores es bastante absurdo".
También alude Aznar a otra crisis, la institucional, que también aqueja a nuestro país. Se declara a favor de reestructurar "desde un punto de vista competencial la situación del Estado", algo que podría llevar a recuperar "algunas competencias que en este momento tiene cedidas a las comunidades". En su opinión, "España está en una situación de Estado residual y hay que recomponer el Estado".
Para el ex presidente del Gobierno, "la actual crisis española no es sólo económica; es una crisis económica añadida a una crisis política de fuerte contenido institucional".
En la entrevista apenas hay referencias al actual PP y tampoco abundan las críticas directas al Gobierno, pero sí alude Aznar a la última remodelación del Ejecutivo, diciendo todo lo que no hubiera hecho, que es justo lo que sí ha hecho Zapatero. En su opinión, hay que abordarla con "enorme discreción", no hacerla "estando fuera de España", no acometerla "antes de unas vacaciones", "hacerla tú y no que te la hagan" y cumplir un quinto objetivo, que "si la haces, sea para mejorar". "Es difícil encontrar algo que haya funcionado", concluye Aznar respecto a los cambios en el Ejecutivo.
Aznar, que elogia a sus cuatro o cinco "muy buenos" asesores frente a los 60 que acumula el presidente en Moncloa, habla de su ex ministro de Economía, Rodrigo Rato. Preguntado por si volverá a la política, dice que no tiene "ni idea". "Si me pidiera consejo, que no me lo ha pedido, yo le diría que se mantenga alejado de la política. Pero, como no me lo ha pedido, a lo mejor es que no le interesa mantenerse alejado", apunta.
En cuanto a él mismo, se declara "muy contento" en su actual situación, pero afirma que "el tiempo que eres presidente siempre lo recuerdas como el mejor de tu vida".